Un tipo le dice a un amigo:
– Oye estoy preocupado. Mi esposa se desconcentra y pierde el interés cada vez que hacemos el amor.! ¡Y no sé qué hacer!»
-¿Sabes que a mi me pasaba lo mismo con mi mujer? Lo que hice una vez, fue que cuando estábamos haciendo el amor y noté que estaba perdiendo el interés, saqué mi pistola y eché un tiro al aire. ¡Del susto, mi mujer se excitó de nuevo y terminamos genial.!
– Haz la prueba. Toma, te presto la pistola.
Al día siguiente se encuentran los dos de nuevo.
– ¿Y qué? ¡Cuéntame! ¿Cómo te fue con mi técnica?
– Ni me hables! -responde el otro espantado
– Estábamos haciendo el 69 y cuando ví que mi mujer estaba desanimándose, saqué la pistola y eché un tiro al aire.!
– Del susto, mi mujer se cag… en mi cara, me mordió abajo y para completar… del armario salió un zambo calato con las manos arriba pidiéndome perdón.