La tuberculosis es una enfermedad originada por el bacilo de Koch, una bacteria que ataca a los pulmones y otras zonas del cuerpo.
Esta enfermedad no distingue clases sociales como se pensaba años atrás, no solo se puede presentar en zonas pobres donde se dan condiciones de hacinamiento, se han reportado casos en personas que viven en el San Isidro y distritos de clase media.
El contagio de la tuberculosis es a través del aire, y sucede cuando una persona enferma estornuda o tose, es así que la bacteria se esparce y si una persona saludable aspira el microbio tendrá una alta probabilidad de contagiarse.
Prevención
Por lo antes mencionado, es sumamente importante, si se tiene contacto con muchas personas como en el transporte público, abrir las ventanas para que haya ventilación y evitar así que se concentren microbios en el ambiente.
Las personas con defensas bajas como enfermos de VIH, que tomen medicamentos para la diabetes, quimioterapia, ancianos y bebés son especialmente proclives a ser contagiados.
Alimentarse sanamente para mantener el fuerte el sistema inmunológico. Los bebé recién nacidos deben ser vacnados con la BCG
Si se tiene contacto frecuente con una persona infectada y se es menor de 19 años debe tomar pastillas para evitar la TBC, sólo bajo indicación médica.
Síntomas
Los síntomas son:
tos con flema por 15 días o más.
Fiebre que aumenta por la noche.
Tos con sangre.
Baja de peso, menos apetito.
Sudores nocturnos.
Dolor de pecho.
Debilidad y cansancio.
La tuberculosis es curable, el tratamiento luego del diágnostico debe ser inmediato y consistirá en la administración de pastillas.
El enfermo debe ser constante para curar la enfermedad, si deja el tratamiento a medias, la enfermedad puede hacerse más resistente.
El tratamiento es gratuito por parte del Estado.