Un cerdo de 1.040 kilos, natural de la ciudad de Ningxiang y considerado el más gordo de China hasta ahora, fue sido coronado rey de las Olimpiadas Porcinas celebradas en esa localidad del centro del país asiático en 2007.
De acuerdo con el diario «Xiaoxiang Morning Post», de la misma provincia donde se halla Ningxiang, el cerdo premiado es de color blanco -muy llamativo ya que en China los puercos suelen tener pigmentación negra-, tiene unas extremidades muy fuertes y es muy querido por su dueño, el granjero Xiao Shaohong.
Xiao asegura que ha recibido ofertas de hasta 50.000 yuanes (unos 5.000 euros, 7.400 dólares) por el animal, pero se niega por ahora a deshacerse de él, y quiere en cambio ofrecerlo como regalo a los Juegos Olímpicos de Pekín, como símbolo de «riqueza y felicidad».
Las Olimpiadas Porcinas reunieron equipos con los mejores cerdos de China, como los de Pekín y lejanas localidades como Taihua, Jinhua, Rongtang y otros lugares famosos por el delicioso sabor de sus cochinos.
Entre las pruebas disputadas por los animales destacaron la carrera de 50 metros libres (que el cerdo ganador recorrió en 26 segundos), la competición de obstáculos (vencida por un competidor de Ningxiang, con 36 segundos) y hasta natación, deporte en el que el podio se lo repartieron dos cerdos de Changsha y uno de Pekín.
En la competición de comer más rápido, la medalla de oro fue a parar a un animal de la provincia noroccidental de Gansu.
Los cerdos son uno de los animales más apreciados por la cultura tradicional china (que en 2007 celebra el Año del Cerdo según su calendario lunar), y son sinónimo de prosperidad y seguridad económica.