Li Chen llevaba una vida normal hasta el mes de junio de 2010 cuando, sin motivo aparente, comenzó a llorar y no pudo parar hasta después de 11 meses después. Aunque no es un mal parecido, pero esto nos hace recordar a Calvin Inman: el joven que llora sangre.
Todo el mundo en ese año recibió la noticia: «Una niña china de 12 años de edad sufre un extraño mal que no le permite dejar de llorar hace once meses«.
Li Chen, nacida en Linyi, en la provincia de Shandong en China, llevaba una vida normal hasta el pasado mes de junio cuando, sin motivo aparente, comenzó a llorar y no ha podido parar hasta ahora.
Su familia se encuentra preocupada y trata de encontrar una explicación a lo que le puede estar pasando a la pequeña, ya que hace once meses la familia vive con el calvario de la niña.