Resulta un momento complicado cuando los niños no quieren hacer su tarea. Es preocupación para los padres porque se resisten a cumplir con sus deberes académicos.
Lo principal es que los padres deben entender el papel que cumplen durante la labor post escuela, Deben supervisar la labor que realizan los chicos, más aún si son pequeños. A partir de tercer grado, ya están capacitados para hacer las cosas por su cuenta y los padres, apenas deben revisar lo hecho y que todo esté bien.
Los padres no le deben hacer la tarea a sus hijos sino ¿cómo aprenden ellos? Esto crea problemas de autoestima en los pequeños, de dependencia e incapacidad para poder tomar sus propias decisiones.
Es importante saber identificar los puntos fuertes y débiles de los niños en las áreas de memora inmediata, memoria secuencial, memoria auditiva y memoria visual. Para ello, es importante que repita lo que escuche o vea, guardando una buena secuencia cuando narre lo aprendido,
Hay cosas que se deben memorizar y hay formas de hacerlo más entretenido:
- Para comprender una lectura es mejor que su hijo explique con sus propias palabras lo leído, como si estuviera contando un cuento.
- Permítale asociar fechas importantes con datos como su estatura, número de casa, pisos de un edificio cercano, edad de sus hermanos.
Las enciclopedias, diccionarios, videos y ahora las computadoras, son de gran ayuda en este proceso.
Para que un niño pueda hacer sus tareas con tranquilidad, es indispensable:
- Menor ruido posible
- Excelente iluminación
- Buena ventilación
- Implementos a mano
- Limpieza y orden
- Postura correcta
- Ambiente tranquilo
Y se debe evitar:
- Estudiar con la televisión encendida.
- Trabajar en carrera para salir a jugar.
- Comer mientras se estudia.
- Hacer los deberes si se está muy cansado.