En este siglo 21 de avances científicos y tecnológicos, la industria de la belleza y los Spa están liderando el mercado.
Se busca cada vez más el equilibrio de manera tal de tener un peso saludable, acorde con nuestra talla y edad, armonioso y bello a la vista, obtenido como resultado de una alimentación balanceada, una práctica diaria, moderada y responsable de actividad física, y una vida cada vez menos estresada y más inclinada a lo natural.
No obstante, a veces, con la finalidad de lograr nuestro objetivo de un cuerpo bello, recurrimos a un sin número de tratamientos para obtener resultados en el menor tiempo y con el menor esfuerzo. En este ínterin, podríamos encontrarnos con métodos que lejos de llevarnos a resultados esperados, quiebren nuestras ilusiones y expectativas.
Este podría ser el caso de los tratamientos corporales que mucho se difunden y promocionan en Clínicas Estéticas y Centros Spa. Muchos pacientes luego de algunas sesiones de tratamiento, quedan realmente fascinadas con los resultados y los difunden y sobredimensionan pero, otras personas que no tuvieron la misma suerte sienten que no son tan maravillosos como dicen ser y se sienten decepcionadas.
¿Qué establece la diferencia en los resultados de paciente a paciente? ¿Son los tratamientos corporales realmente efectivos o es cuestión de Marketing?
Para empezar, los diferentes tratamientos corporales patentados por sus fabricantes y aprobados por FDA, como por ejemplo Endermologie, Velasmooth, Vacumterapia, Carboxiterapia, Ultrasonido, Corrientes rusas entre otros son tratamientos que derivaron de técnicas médicas previamente usadas como herramientas para tratamientos o rehabilitación de alguna patología clínica. Algunos científicos observaron y estudiaron los beneficios secundarios de estas técnicas y los aplicaron en estética. Partiendo de ahí tendremos que los tratamientos corporales estéticos tienen algún respaldo científico.
Si bien es cierto los beneficios estéticos de estas técnicas pueden ser buenos e incluso sorprendentes, como en toda terapia médica, un tratamiento o medicamento que resulta bueno en un grupo de personas, no necesariamente es bueno para la población en general. En este punto entran a tallar, las diferencias raciales y genéticas de cada individuo, los hábitos de alimentación y de actividad física, las condiciones somáticas y hormonales en el momento del tratamiento, la exposición a sustancias nocivas, el grado de estrés, etc.
Entonces hablamos de terapias, que deberían ser administradas previa evaluación del paciente y estableciendo las necesidades, prioridades, y deseos del mismo. No todas las terapias podrían ser aplicadas a una misma persona y no todas las terapias darán los resultados esperados en todos los pacientes. La tasa de éxito o de fracaso debería ser expuesta previamente al paciente para no crear expectativas que queden luego truncas.
Es importante señalar que los tratamientos corporales estéticos pueden modelar el cuerpo humano y en la mejor de las condiciones llegar a colmar las expectativas del paciente, no obstante no son tratamientos de reducción de peso. La reducción de peso se logra con alimentación balanceada y ejercicio físico.
No puedo pretender tratar obesidad con terapias corporales de modelación corporal. No obstante las terapias de remodelación corporal si serían instrumento y complemento importante de la terapia de reducción de peso, puesto que me ayudarían con el tratamiento de los cúmulos de grasa subcutánea localizados en puntos críticos como abdomen, caderas, espalda, pectorales que son difíciles de remover aún con ejercicio, y en el tratamiento de la flacidez de piel que suele quedar luego de la reducción del peso.
Los tratamientos corporales, pueden llegar a sustituir a una liposucción, claro en un tiempo más prolongado, pero al igual que ésta si bien reducen la circunferencia de cintura y hacen lucir un cuerpo más esbelto no combaten el riesgo cardiovascular que conlleva el sobrepeso y la grasa acumulada en abdomen.
En conclusión no sólo es importante verse bien, también es necesario estar y sentirse bien, por lo tanto si se busca estar bonito y saludable tendremos que combinar terapias estéticas con un tratamiento adecuado de reducción de peso con alimentación sana y actividad física.