Las vacaciones de los adolescentes son todo un desafío, la casa se convierte en una revolución, y no es saludable que estén todo el día con los aparatos tecnológicos a los que ellos le dedican gran parten del día. Más de un adolescente ve las vacaciones como un buen momento de libertad, quizás incluso para correr riesgos.Para que estas vacaciones resulten placenteras e integradoras para la familia le brindamos algunas recomendaciones:
• Lo adecuado es que en este tiempo en que los adolescentes no asisten a clases, se invierta para fortalecer los lazos y la comunicación familiar.
• Es importante establecer sutilmente las reglas, no se trata tampoco de abusar de los límites porque es vacaciones. (las reglas debe ser para todos los miembros de la casa no sólo para el adolescente)
• Prioricemos en todo momento la seguridad para todos los miembros de la familia.
• Considere la flexibilidad de los horarios, recuerde que es vacaciones. Cuidado con excederse en ello, pues lo importante es que el adolescente comparta su tiempo con la familia, existen casos en lo que los adolescentes incrementan su vida nocturna y se pasan todo el día durmiendo, esto no es adecuado para ellos.
• Para la elección del lugar donde se disfrutarán las vacaciones, es necesario llegar a un común acuerdo, con el objetivo de que todos se diviertan y no se de situaciones de conflicto.
• Considere también los lugares que su hijo quisiera visitar con sus amigos.
• No es oportuno sobrecargarlos con reproches, pero sí para tener algunas conversaciones.
• Es necesario escuchar sus necesidades y atenderlas en la medida de lo posible.
• Recordemos que el mundo del adolescente esta centrado en sus amigos, por lo tanto las vacaciones no deben buscar alejarlos de ellos y enclaustrarlos en el hogar si no por el contrario llegar a una justa medida.
• Aproveche las vacaciones de sus hijos para reforzar el vínculo de confianza y comunicación, esto se logra buscando momentos propicios no presionando para que estos momentos ocurran, las vacaciones son momentos ideales para ello.
• Busque compartir momentos para compartir con ellos, actividades y momentos de ocio, que el acercamiento y la conversación surja espontáneamente.
• Si bien es cierto el ambiente familiar se vuelve algo relajado, porque las obligaciones escolares no están presentes, aprovechemos el acercamiento que ellos pueden tener con nosotros.
• Los viajes con los adolescentes conlleva a algunas complicaciones, pero que si están adecuadamente manejadas no tienen por qué echarse a perder las vacaciones.
• Los adolescentes sufren continuos cambios bruscos de humor, por ello es necesario comprender ese tipo de situaciones
• Aprender a separar los tiempos de las vacaciones, es decir el que este de vacaciones el adolescente no significa que estará todo el tiempo en familia, es importante aclarar esto, pues sin duda alguna necesitará de sus amigos.
• Es importante motivar a la participación del adolescente en la programación de las vacaciones, los lugares que se pueden visitar y recorridos turísticos.
• Las vacaciones tienen que se de carácter activo, no se trata de convertirlos en momentos de ocio, o de no hacer absolutamente nada.
• Los padres deben evitar que sus hijos caigan en rutinas diarias.
• Las vacaciones tienen un carácter activo, los padres pueden apoyar a sus hijos para decidir tomar algunas actividades de carácter deportivo o artístico.
• Pueden mejorar en vacaciones su nivel intelectual, hacer deporte y programar visitas a la playa con los amigos.
No es saludable la pasividad en las vacaciones, estar todo el día recostado en el sofá de la sala no es óptimo ni para la familia ni para el adolescente.
Article publié pour la première fois le 27/12/2011