Con el fin de proteger la salud de los niños de la los usuarios en general, el Ministerio de Salud, por medio de la Dirección General de Salud Ambiental – DIGESA, realiza acciones conjuntas de vigilancia sanitaria, fiscalización y control a nivel nacional a los fabricantes nacionales, importadores, comercializadores y distribuidores de juguetes y/o útiles de escritorio.
Esto con la finalidad de garantizar que no sean tóxicos o peligrosos para la salud de la población usuaria, cumpliendo con el Reglamento de la Ley Nº 28376. Ley que prohíbe y sanciona la fabricación, importación, distribución y comercialización de juguetes y/o útiles de escritorios tóxicos o peligrosos, aprobado con D.S. Nº 008-2007-SA y su modificatoria el D.S. Nº 012-2007-SA.
Desde el 2007, DIGESA ha puesto énfasis en la fiscalización de juguetes y útiles de escritorio del mercado local para determinar sus niveles de toxicidad, pues no todos se encuentran realmente aptos para su comercialización.
En los últimos años, se ha sometido a análisis miles de juguetes para determinar si contienen principalmente exceso de plomo entre sus componentes. El resultado de la evaluación dejó una lista casi una centena de productos de alta toxicidad, cuyo comercio está prohibido por atentar contra la salud.
La lista la puede encontrar en la página web de la DIGESA, para una adecuada difusión, pues poca gente consigue acceder a una información completa acerca de los riesgos de estos productos.
La mayoría de productos que aparecen en la lista, contienen entre 10% y 1300% de exceso de plomo permitido, según el límite establecido por la Digesa (90 miligramos por kilo de este metal). Muchos de ellos son carritos, rompecabezas o juguetes didácticos que se venden en diversas locales de la capital.
A fin de año, DIGESA realiza operaciones de fiscalización en Lima, para evitar la venta de estos juguetes tóxicos. Estas actividades cuentan con el apoyo del Ministerio Público y la Policía Fiscal.
Además, la ASPEC (Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios) se encarga de preparar campañas informativas para alertar al consumidor, sobre las especificaciones que se deben tomar en cuenta con miras a las compras en fechas festivas.
Para poder identificar un juguete no tóxico, se debe verificar el código del lote de producto, los datos del fabricante, el número del registro y autorización sanitaria otorgado por DIGESA.
Además, todos los datos deben estar escritos en castellano o tener una traducción respectiva. Se debe revisar que los juguetes tengan las especificaciones sobre la edad y las recomendaciones para el uso del producto siempre que lo requiera.