Semana Santa es una temporada de mucho movimiento en la ciudad, sea por motivos propios de esta celebración religiosa o por turismo. Vamos a enfocarnos en el caso de las personas que concurren a visitar las iglesias durante estos próximos días feriados.

En las últimas semanas, el Instituto Nacional de Defensa Civil, ha venido realizando trabajos en las principales iglesias del Centro Histórico de Lima, para evaluar si están o no, en condiciones de recibir a los fieles católicos durante la Semana Santa. Asimismo recomendó a la población mantener libres los accesos de las iglesias e identificar rápidamente las rutas de evacuación de ellas en caso se presente un sismo o una emergencia.

Consejos básicos:

Cuando hay personas dentro de los templos, deben evitar obstaculizar la salida de algunas personas, en especial de las que sufran de alguna discapacidad, quienes en su mayoría están ubicados en las primeras filas de la Iglesia.

Asimismo, los padres de familia deben colocarle a sus hijos, una tarjeta de identificación con su nombre, el nombre de sus padres, la dirección de su domicilio y teléfono, para facilitar su ubicación en caso se pierdan.

Cuando vaya en grupo al templo, coordine con sus familiares o amigos un punto de encuentro cercano en caso se separen, para así evitar pérdidas.

En caso de incendio actuar rápidamente y ubicar los extinguidores ubicados en espacios visibles del templo o capilla.

Cuidar sus pertenencias. Los amigos de lo ajeno no respetan ni la casa de Dios para cometer sus fechorías, más aún que saben aprovechar la presencia masiva de personas y así confundirse en medio del tumulto.

En sábado de gloria es usual el uso de velas para la celebración eucarística. No perder la atención en ellas porque un movimiento en falso podría causar incendio al interior del templo.

Procesiones:

En caso hayan procesiones, los discapacitados deben acompañar desde una distancia prudente para evitar accidentes durante el paso de los fieles, quienes por lo general ocupan gran parte de la vía por donde recorrerá la imagen.

En calles estrechas se deben evitar los tumultos y aglomeración de personas, pues quita espacio al paso de la procesión y genera incomodidad al momento de transitar.

En el caso de las personas que acompañan la procesión desde su hogar, lo ideal es no poblar los balcones o techos, pues habría alto riesgo de que una cantidad gran de personas, provoquen caídas que derivarían en tragedias por lamentar.