La materia prima que consume un automóvil para poder desplazarse es el combustible. La explosión de este elemento, mezclado con el oxígeno del aire de ambiente, proporciona la energía necesaria para poner en movimiento alternativo a los pistones dentro de los cilindros del motor y hacer girar al cigüeñal, que es la fuente de energía del motor.
El consumo de combustible representa el desembolso cotidiano directo para que un automóvil circule. Requiere de ciertos cuidados y el mantenimiento respectivo, que tienen como punto de partida la calidad misma del combustible utilizado. Los combustibles más usados por los autos modernos son la gasolina –con o sin plomo- y el diesel. También, en proporción creciente, es utilizado el gas licuado de petróleo (GLP) y, según el país, combustibles con importantes porcentajes de alcohol, metano, y el etanol.
El Octanaje
– El octanaje RON (Research Octane Number) de una gasolina está determinado por la comparación de la gasolina con una mezcla de dos hidrocarburos: hepetano (C7H16) e isoctano (C8H18). El primero de ellos es muy poco antidetonante. La proporción de isoctano de la mezcla con mismo nivel antidetonante que la gasolina analizada, proporciona el índice de octanaje.
– Existe otro tipo de octanaje llamado MON que indica de manera más exacta cómo se comporta el combustible cuando se carga. Esta definición también se basa en la mezcla de isoctano y n-heptano. La diferencia con el RON es que se sobrecarga más el motor en el ensayo: se utiliza una mezcla precalentada, el motor más revolucionado y tiempos de ignición variables. Típicamente, y dependiendo de la composición del combustible, el MON de una gasolina moderna puede estar unos 10 puntos por debajo del RON. Unas especificaciones adecuadas de un determinado combustible requieren de un RON y MON.
El uso de una gasolina de octanaje menor que el sugerido por el fabricante origina un cascabeleo o picado de motor, ya que al ser la gasolina menos antidetonante –o más detonante- que la especificada, explota antes de tiempo. Eso deteriora al catalizador y también al motor, que se carboniza.
Con las preocupaciones ambientales y la introducción de los catalizadores en la línea de escape, la gasolina con plomo está desapareciendo del mundo. Primero porque contamina el ambiente y ocasiona daños a la salud (el plomo inhalado se deposita en la sangre) y segundo porque destruye las capas de platino (Pt) y rodio (Rh) del catalizador. En el Perú utilizamos tres tipos de gasolina sin plomo: 90 (normal), 95 (super), 97 (super plus) y todavía, para antiguos motores de baja compresión, existe la alternativa de usar gasolina con plomo de 84 octanos. La gasolina con plomo es necesaria para motores antiguos que requieren la deposición de plomo como lubricante en los asientos de sus válvulas de escape.
Indicadores de Consumo de Gasolina
La mayoría de conductores no vigilan sus gastos de consumo y no perciben un aumento del consumo sino cuando comienzan a percibir una mayor recurrencia a las estaciones de servicio. Existen algunos indicadores que advierten un consumo elevado de gasolina:
– Se incrementan las visitas al grifo para los mismos recorridos habituales de todos los días.
– Humo negro por el escape al acelerar. Señal de que está saliendo gasolina sin combustionar, lo que es un verdadero desperdicio.
– Olor a gasolina. Se están escapando vapores de gasolina o incluso se puede estar chorreando gasolina.