El buen cuidado del tapizado de nuestros muebles no solo hace que su aspecto sea bueno, sino que alarga la duración del mismo.

Es muy importante mantener una rutina de limpieza para mantener en buen estado nuestros muebles.

Si accidentalmente manchamos la superficie de nuestro mueble, hay que tratar la mancha en el momento, para evitar daños mayores.

El cuidado cotidiano incluye el retirar el polvo todos los días (como en el resto de la casa). Sacudir los almohadones y pasar la aspiradora en los mismos, así como en las partes no removibles, esto es algo que debemos hacer a diario.

Si se mancha con algo soluble en agua, utilizaremos una mezcla de una cucharada de borato de sodio en tres tazas de agua tibia, ó un quita manchas.

Con una tela limpia pasamos esta solución desde los bordes al centro, para que nos se agrande. Hay que evitar que se moje el relleno, solo la tela manchada. Dejamos secar.

Si la mancha es de grasa, debemos colocar inmediatamente talco sobre la misma, para que absorba. Dejamos media hora, y retiramos con un cepillo.

Un ligero golpe puede llegar a causar un daño muy serio sobre nuestras puertas, más aun si estas son enchapadas, puesto que son huecas y están formadas por finas láminas de triplay, que fácilmente se astillan.

Aunque reparar este tipo de puertas puede resultar un poco trabajoso, se logra un acabado bastante disimulado del daño ocasionado por el golpe.

Nota: Dependiendo de la severidad del daño, puede optarse por el cambio completo de la puerta.

Para lograr el objetivo, lo primero es lijar la zona dañada para retirar las astillas, y colocar sobre el espacio deteriorado pasta reparadora de madera (masilla para madera), o bien hacer una solución casera con serrín y cola de carpintero. Es más recomendable emplear la primera opción, porque obtendremos un acabado de mayor consistencia sobre el que aplicar la pintura.

Luego de aplicar la masilla para madera sobre la zona afectada, procederemos a lijar la superficie tratando de mantener la forma  de la zona afectada (sea plana o con alguna forma en especial). Tras lijar la madera deberemos aplicar una capa tapaporos, (dejar secar) y aplicar un una capa de sellador y por ultimo aplicar cuidadosamente dos manos de pintura, para lograr un acabado uniforme y disimular lo máximo posible el desperfecto ocasionado.

Una buena idea para renovar un ambiente es cambiar el color de las paredes, pintar las paredes en tonos degradé le dará a la habitación un aire original y moderno, puedes dar la sensación de amplitud y luminosidad o calidez y elegancia según el tono que escojas.

Pasos para pintar paredes en degradé

• Lo primero es escoger el color principal y la gama de colores, de preferencia elegir tres tonos del color , es necesaria mayor cantidad del tono claro,  para difuminar los tonos.

• Aplicar el tono más oscuro el parte inferior o superior según se haya planeado, si se eligió un modelo dibujarlo en la pared con lápiz para guiarte.Pintar del tono claro toda la pared, de preferencia con un rodillo para que quede más parejo.

• Luego de haber pintado la parte oscura combinar una parte del color oscuro con el claro para degradar las divisiones de color, si lo prefieres también puedes mantener los colores sin difuminar los bordes y resultaría algo asi:

Cuando termines de aplicar el color oscuro, ahora debes difuminar el color medio con el color más claro y difuminar entre ambas franjas. Para lograr el degradado, ayúdate con brochas secas y trata de unificar los tonos para que no queden rastros de líneas ni franjas divisorias entre tonos. Acuérdate de limpiar bien el pincel cada vez que utilices un tono diferente.

Para hacer el difuminado podemos utilizar la brocha, un trapo para un efecto más rústico o una esponja, según el efecto que queramos obtener.

En el caso de necesitarlo, mezcla tonos para dar un efecto sombreado o mayor unificación entre los colores.

No te preocupes si quedan líneas o franjas, la pared igualmente se verá original y, en caso de no quedar tan difuminada, lograrás un efecto muy llamativo.

Si piensas que no vas a poder difuminar e integrar bien los tonos, marca líneas o dibujos con un lápiz y pinta cada sección con un tono similar, aunque sin difuminar por completo. El efecto será vistoso y las franjas bien notorias.

Puedes pintar tu pared realizando franjas horizontales, verticales, curvas, asimétricas, etc.

Si crees que el resultado fue muy difícil de lograr o es demasiado abrumador para tu espacio, opta por dejar una sola pared en degradé y las demás pintadas de un

tono más suave, logrando así luminosidad y amplitud.

Aquí algunas inspiradoras ideas:

Fuente:  www.horapunta.com