Un hombre acude al médico al ver que tenía uno de sus testículos de un color azul intenso. Al llegar al consultorio éste lo revisa varias veces y luego le da una tremenda noticia:
– Mire le tengo que amputar urgente el testículo, tiene un principio de gangrena y si no lo corto, Ud. pasa a mejor vida…!
Al día siguiente el hombre es trasladado al quirófano donde se lleva a cabo la intervención.
Después de unos 15 días, el tipo regresa desesperado:
– ¡¡Doctor, doctor…!! ¡¡¡Esta mañana me encuentro con que tengo el otro testículo azul como el anterior!!!
El médico preocupado lo somete a otra revisión, la cual concluye con el mismo diagnóstico.
Al día siguiente en quirófano se le amputa el testículo restante.
Dos semanas después, preso de un ataque de nervios, el paciente regresa a ver a su doctor:
– ¡¡¡Doctor, doctor…!!! ¡¡¡Mire esto, ahora lo que tengo azul es mi miembro, dígame que no me lo tiene que amputar!!!
El doctor tras una corta revisión, confirma el triste diagnóstico. Lo somete nuevamente a una complicada cirugía en la cual le amputa el pene y en su lugar le coloca una manguerita plástica transparente.
Tres semanas después el hombre regresa como poseído, derriba la puerta del consultorio del médico y grita:
– ¡¡¡Escúcheme doctor…!!! ¿¿Qué carajo está pasando…?? ¿¿Sabe qué es lo que se me puso azul ahora….?? ¡¡La manguerita de plástico!!
¿¿Qué m…. es lo que tengo…??.
El médico después de calmarlo lo vuelve a revisar y, aliviado, le responde:
– ¡¡¡Quédese tranquilo mi amigo, usted tiene vida para rato, lo felicito!!!!
– !!Lo he revisado a fondo y ya no tengo dudas!!:
¡¡¡SUS JEANS DESTIÑEN!!!