El proceso electoral en Estados Unidos de 2012 y hubo un candidato que conoce a la perfección las calles de Virginia, se mueve con destreza y ha vivido más de una vida, cuya candidatura al Senado causó furor en las redes sociales.
Hank tiene bigotes, pero no es un ser humano, sino un gato y según el diario »The Washington Post», su condición de gato callejero no le ha impedido plantarle cara al demócrata Tim Kaine y al republicano George Allen en la campaña por el Senado en el estado de Virginia.
Por el contrario, el candidato «independiente» de cuatro patas ofrece cualidades extra como «energía y determinación».
Y, según la página electrónica de su candidatura, Hank conoce de cerca los problemas de aquellos menos afortunados debido a que «desde el primer día de su existencia ha sido un luchador».
«Por haber vivido en las calles y su condición de desposeído, Hank aprendió el valor del trabajo intenso» dice la web del aspirante que residen en el condado de Fairfax, en Virgina.
Aunque también hay aspectos de la vida del candidato, que no son exhibidos con tanto orgullo. El director de su campaña, Matthew O’Leary, asegura que Hank tiene defectos, y algunos graves, como la pereza y su debilidad por el queso.
O’Leary reconoce que el aspirante a senador, pese a sus garras, «no infunde temor».
Hank lamentablemente dejó este mundo el 13 de febrero de 2014.