Un extraño caso tiene lugar en Gran Bretaña. Un hombre, del condado de Surrey, pueblo ubicado al sudeste de Inglaterra, tenía a más de dos mil ratones en su casa, a quienes consideraba como sus mascotas.
Al hombre, de quien no se dio a conocer su identidad, aseguró a las autoridades locales que decidió este estilo de vida pues tenía el firme deseo de sentirse una celebridad. “Era como el reto de un reality”, aseguró según la versión recogida por The Sun.
Los roedores fueron decomisados por el Santuario animal de Welsh en noviembre del año pasado, pero se le permitió a este hombre quedarse con apenas dos. Pero en tres meses, se han reproducido hasta llegar a 500.
El hombre, de 30 años, ha dicho esta vez que ya no quiere vivir con los ratones.