Que duda cabe que las mascotas son muy engreídas por nosotros pero siempre hay reglas que hay que respetar por parte de ellos como el de no treparse a la mesa o a los muebles del hogar.
Pero hay uno que prefiere omitir todo reglamento del hogar. Un pitbull fue captado en los precisos momentos en que hacía de las suyas en el sofá – cama de su dueña, quien dejó una cámara escondida para captar las travesuras de su mascota.
El perro observa el lugar y desaparece de la toma por un tiempo. Luego se sube a la cama donde está también un gato. El can pasea por el mueble con tranquilidad hasta el momento en que decide dar rienda suelta a su placer y revolcarse en la cama.
El can parece que disfruta de este prohibido lugar. El gato solo lo mira hasta que el perro decide acercarse y este le da un zarpazo, incidente que tranquilizó a este travieso pitbull.
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