Desde que tengo memoria y vengo de provincias, la navidad ha sido recibida con mucha alegría.
Diciembre es el mes en el que acaban las clases y antes a diferencia de ahora los nacimientos y árboles se armaban más o menos en la quincena de diciembre y no desde noviembre como ahora la moda comercial nos ha obligado.
Y es que estamos dándole clima de navidad desde inicios de mes por que a los niños les entusiasma y a los grandes nos hace recordar aquellas épocas qye también vivimos.
Hace tres décadas no había los árboles navideños actuales que se armaban fácilmente, nuestros árboles comenzaron con la imaginación de los más grandes en la casa, el primer árbol que recuerdo fue un pequeño arbusto o rama tupida que mis hermanos mayores pintaron de blanco pusieron en una maceta y adornaron “bombas de vidrio”, que ahora todas son de plástico.
Un caso curioso aparte era una nieve que se colocaba al árbol y que era una especie de algodón que estirabas por las ramas para que pareciera un tipo de nieve, lo anecdótico era que este material al frotarlo sobre tu brazo picaba bastante y era muy bueno para hacer bromas.
La 2da generación de árboles que vi fue aquellos hechos a base de fierros soldados y que había que vestir con papel celofán de color verde brillante, el cual se cortaba en tiras largas y con cortes perpendicurales enrollándolo por cada rama.
Luego fue llegando los árboles chinos que ahora nos inundan.
El nacimiento ha tenido pocos cambios y antes de los pliegos de papel verde salpicado con colores diversos que usamos hoy, antes uno mismo debia comprar papel de despacho (hoy papel kraft) y salpicarlo con unos tintes verdes, dejándolo secar, luego el procedimiento era el mismo, arrugarlo y armar los cerritos.
La Casita o pesebre siempre ha sido una tarea que en mi casa la realizaba un hermano, ya se había vuelto especialista en casas, con palitos del jardín o encontrados por la calle servía para la tarea.
Así que los pesebres que he visto en mi familia han pasado a ser hechos de palos, cajas de cartón recortadas y ahora en mi casa tengo una hecha por mi de corchos de vino y no queda mal.
Al parecer la navidad para muchos de nosotros se nos ha facilitado comprando todo casi listo, pero los que hemos vivido en otras épocas con menos recursos siempre recordamos aquellos tiempos en que debíamos ingeniarnos para con poco presupuesto hacer algo BBB (bueno, bonito y barato)
Hoy en día los estudios científicos le dan la razón a las cosas armadas o hechas por nosotros mismos por que se dice que une a la familia en una tarea común, entusiasma a los chicos y de yapa nos entretiene. Bienvenida la Navidad !