Estamos a un mes de conmemorar los 50 años de la Tragedia del Estadio Nacional, uno de los peores accidentes ocurridos en un recinto deportivo no solo del Perú, sino también del mundo Más de 300 personas perdieron la vida el 24 de mayo de 1964 en el marco del juego entre Perú y Argentina por un lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio.

Argentina derrotaba a la bicolor por uno a cero, cuando a los dos minutos para que acabe el partido, Perú empató el marcador, pero la conquista fue anulada por el árbitro del partido, en uruguayo Ángel Pazos.

Esa jugada transformó en pesadilla la tarde de fútbol en el coloso de José Díaz. La desgracia, la mayor en la historia del fútbol, acechaba dentro y fuera del recinto más aún tras la aparición del “Negro Bomba”, un simpatizante que bajó de la tribuna al gramado de juego con el fin de agredir al cuestionado juez del partido.

“Yo ordené lanzar bombas lacrimógenas a las tribunas. No puedo precisar cuántas. Nunca imaginé las nefastas consecuencias”, reconoció el comandante de la policía Jorge de Azambuja, quien sería sindicado como el culpable de la hecatombe siete años después, en setiembre de 1971.

El portal peruano ArkivPerú, conocido en la red por su complicación de datos relacionados con nuestro país en décadas pasadas, circuló en la red un vídeo inédito, con detalles que pocos sabían o conocían acerca de esta lamentable tragedia.
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