Hace muchos años cuatro personas vieron una nave Madre en las cercanías de la sierra de Córdoba.
Dos amigos iqueños efectuaban un paseo por la sierra cuando de pronto su auto sufrió un desperfecto y tuvieron que caminar para buscar ayuda y tratar de arreglar el desperfecto. Repentinamente, observaron algo que a primera impresión parecía una inmensa nube luminosa., quedándose parados por la impresión siguieron mirando el cielo estrellado y de pronto vieron que cinco nubecillas ovaladas giraban al rededor de la nube más grande ,esta tenía brillo metálico y el nítido perfil de un ovni de los que tienen cúpula alta los cinco platillos más chicos seguían revoloteando en forma veloz y ordenada. Los amigos iqueños quedaron estupefactos con el avistamiento hasta que las naves desaparecieron raudamente en el firmamento.
Emocionados por el espectáculo del que fueron testigo y cansados por la larga caminata se tendieron al piso comentando su extraña experiencia, después de algunos largos minutos apareció por allí un jeep con dos ocupantes que los subieron al auto y los trasladaron a la ciudad más cercana los amigos iqueños les contaron a sus rescatistas su visión y cual sería su sorpresa al conversar estos también habían visto a los ovnis y después de un extraño silencio coincidieron en que no se trataba de ninguna alucinación sino que habían sido testigos de un encuentro cercano del tercer tipo.
Esta historia ocurrió hace muchos años , sin embargo nunca salió publicada en ningún diario de la ciudad.
Relato extraído de la Revista LO INSOLITO del año 1977.
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