Indicadores:
Los olores suelen acompañar la falla en el funcionamiento de un componente que contiene o funciona sobre la base de fluidos. A menudo, el olor es más evidente que cualquier otro indicio sensorial, como en el caso de una pérdida de gasolina. (A propósito de ello, la gasolina en sí misma no emite mucho olor, por eso es que el gobierno exige el agregado de una esencia por razones de seguridad). Es esencial familiarizarse con los olores de los fluidos vitales de su vehículo. Y es recomendable conocer cómo varía el aroma de un fluido específico dependiendo de si es nuevo o usado, o si está en frío o en caliente. Es útil conocer cómo huelen una vez que entran en contacto con un sistema de escape a alta temperatura. Es similar al valor de conocer la diferencia entre qué alimento huele a fresco y cuál se ha echado a perder.
El enfriador del radiador tiene un aroma dulzón y definitivamente químico. Ya sea que haya una pérdida debajo del capó, en la alfombra interior, esté goteando en un sistema de escape a alta temperatura o saliendo por el tubo de escape, el olor será prácticamente el mismo. Si su motor experimenta una pérdida intermitente de líquido enfriador, pero se advierte un olor a enfriador debajo del capó durante el calentamiento únicamente, se puede sospechar acerca de una falla en una bomba de agua o posiblemente, un problema en el radiador.
El olor de otros fluidos que pierden por debajo del capó es difícil de detectar desde el asiento del conductor, a menos que goteen en el sistema de escape cuando la temperatura es alta. Todos los fluidos sobre la base de petróleo huelen de modo similar: es un olor a caucho quemado; mientras que el líquido para la dirección hidráulica que es de base mineral tiene un aroma más picante. Si estos olores se advierten únicamente después de un cargado de motor importante, la pérdida se registra en las primeras etapas, pero deben verificarse para evaluar su grado relativo de riesgo. Cuando no se requiere una reparación inmediata, al menos usted puede anticipar (y prepararse para) los costos futuros de una eventual reparación.
Olores Ruidosos:
Un olor a caucho quemado proveniente del interior del capó acompañado por un sonido agudo y chirriante que cambia de altura, a medida que usted acelera probablemente sea un indicador de que hay una correa accesoria a punto de zafarse, probablemente debido a una gran resistencia rotacional en uno de sus componentes accesorios. Los alternadores, las bombas de agua, las bombas de inyección de aire (smog), los compresores de aire acondicionado y otros accesorios del motor, dejan de rotar cuando fallan, se «funden» o se «atascan».
Según cuál sea el componente de que se trate, y el tipo de configuración de correa de transmisión de su vehículo, será posible efectuar un procedimiento de defensa (cortar la correa) a fin de permitirle continuar hasta llegar a un taller de reparación. Si su vehículo tiene una única correa de transmisión «serpentina», o se ha atascado la bomba de agua, sin importar qué tipo de sistema de correa de transmisión tenga su vehículo, es hora de llamar a la grúa. De otro modo usted corre el riesgo de sobrecalentar el motor aunque la distancia sea corta.
Otras caracteristicas:
Olores Difíciles de Identificar
Olor Recalentamiento