El periodismo es conocido como el «Cuarto Poder» y posiblemente, las redes sociales se puedan convertir en un «quinto». Es porque en ellas, especialmente en Twitter, se pueden conocer historias totalmente insólitas.
Conozcamos la historia de la joven Breanna Mitchell, quien el 20 de junio se tomó un «selfie» en Auschwitz, campo de concentración nazi de la Segunda Guerra Mundial y la subió a Twitter.
Casi un mes después de colgar su imagen llegó el drama porque la foto se convirtió en viral y recibió una serie de críticas. ¿Cuál fue la razón? En la imagen aparece sonriendo y complementa la descripción con un emoticón sonriente, algo que provocó la ira de muchos tuiteros en el mundo quienes coincidieron en que no se trataba del lugar ideal para tomarse una foto sonriendo y compartirla en las redes.
La imagen tiene más de 4 mil RT y sus seguidores aumentaron a proporciones enormes, algo que sorprendió a @princesBMM, quien aguantó cada crítica recibida en su cuenta.
Ella explicó que su sonrisa no se debía a un acto de insensibilidad contra el sufrimiento en Auschwitz sino que era por la alegría de completar un viaje que siempre había planeado realizar con su padre, que falleció hace apenas unos meses.
Pero las críticas no cesaron, más aún cuando Breanna Mitchell dio RT a mensajes de apoyo que recibía por parte de la gente que pensaba que el planeta está lleno de gente grave que le pedía borrar la foto.
Un último tuit sentenció la posición de la joven respecto a este asunto: “Cuando sea más grande odiaría ser una mujer preocupada de las decisiones de una adolescente que ni siquiera es su hija. ¡Maduren!”.