Dicen que detrás de todo gran jefe hay una excelente secretaria. Y no es para menos porque además de ser la mano derecha de éste, ella ejerce funciones fundamentales en el día a día de la empresa.
Algunas de las características que definen a una buena secretaría son los siguientes:
-Una buena secretaria debe ser acreedora a la máxima confianza por parte de su jefe.
-Para poder atender la mayor cantidad de temas posibles y hacerlos sin estrés, es fundamental el apoyo de una secretaria intuitiva e inteligente.
-Ser una secretaria eficiente es saber lo que el jefe necesita para pensar y anticiparse a darse con la seguridad de no,
-Debe convertirse en la garantía de la ejecución de cualquier reunión en donde se tomen decisiones. Así, la mente del jefe puede descansar y ocuparse de cosas nuevas, con lo que su productividad será mayor.
-Una buena necesaria necesita aprender tanto como el jefe. Debe ponerse al día en todo lo que relaciones o involucra a la empresa. Debe estar en continua formación, realizar cursos de especialización sin que el normal desarrollo de su labor diaria se vea afectada.
Sus funciones:
1. Redactar documentación específica y elaborar informes y presentaciones.
2. Buscar información a través de la Internet y gestionar los correos electrónicos.
3. Gestionar el archivo.
4. Filtrar llamadas.
5. Llevar a cabo la coordinación y comunicación con el resto de departamentos.
6. Organizar reuniones, recibir visitas externas y gestionar viajes.