La lectura en los niños refuerza sus capacidades lingüísticas, aprenden las palabras de manera más veloz, ayudan a su comprensión y amplian su vocabulario.
Propiciar desde que son niños este hábito facilitará más adelante su desempeño en el área escolar, además de enriquecer su vida y ampliar sus horizontes con nuevos conocimientos.
Cómo incentivo el hábito de lectura en mi hijo
Siempre es mejor acercarlos desde pequeños a los libros. Al comienzo, los padres pueden narrarle cuentos a los pequeños y comprarles libros de acuerdo a su edad.
Se puede usar como gancho inicial cuando son niños muy pequeños, libros con varias ilustraciones, con historias de acuerdo a su edad.
Consejos útiles:
La fuerza del ejemplo
Si los niños observan a sus padres leer usualmente, seguramente lo harán ellos también. Se debe crear un ambiente propicio en la casa para
la lectura, que los niños tengan acceso fácilmente a los libros.
Presentarles libros antes de que sepan leer
Sembrarles curiosidad, narrarles historias, instrucciones de juegos. Indagar en los gustos del pequeño, nunca forzarlos, leer debe ser para ellos una actividad recreativa, los padres deben ofrecerles libros de acuerdo a su edad.
Planificar las actividades del niño
Algunas actividades pueden absorberlos de tal manera que no deje espacio para la lectura, ejemplo de ello son videojuegos o televisión que al ser más visuales y requieren menos concentración pueden hacer menos atractivo el hábito de lectura.
No repetir constantemente lo aprendido
Esto puede provocar aburrimiento en el niño, tampoco obsesionarse y obligarlo a leer todo el tiempo, los pequeños requieren de otras actividades de ocio, como actividades físicas al aire libre, juegos, paseos, sociabilizar con sus compañeros.