Las antiguas culturas existentes en el Perú como la Tiahuanaco y la Inca han dejado un legado inmenso de construcciones, artefactos y utensilios que, sin duda, nos demuestran el increíble avance en tecnología, astronomía e ingeniería que se tuvo en aquella época. Todos estos increíbles vestigios han dado a conocer al mundo la majestuosidad y el gran nivel que tuvieron todas estas antiguas culturas peruanas, muchas veces subestimadas. Pero también han surgido muchos cuestionamientos muy lógicos que hacen deducir que los antiguos peruanos estuvieron estrechamente relacionados con supuestas razas extraterrestres.
Antes de dar a conocer los hechos a más detalle quisiera dejar claro que no dudo del gran potencial de nuestros antepasados, y ni de su vasto conocimiento, teniendo en cuenta la época en que vivían; sin embargo existen evidencias ‘innegables’ que parecen afirmar que se recibió asesoría o ayuda de seres extraterrestres en el pasado.
La cultura Tiahuanaco
Según los historiadores la cultura Tiahuanaco se desarrolló en Bolivia, 1,500 años a.C., cerca de la actual ciudad de La Paz. Esta cultura se expandió hasta el sur del Perú y el Norte de Chile y su apogeo se dio entre los siglos IV y X de nuestra era. Misteriosamente Tiahuanaco se extinguió, alrededor del siglo XII.
Tiahuanaco duró aproximadamente 2,500 años, pero a pesar del tiempo de vigencia que tuvo se sabe muy poco de ella. Lo poco que se sabe ha sido obtenido gracias a los restos arqueológicos existentes hasta hoy en día. Estas reliquias dan cuenta de una extraordinaria civilización con sorprendentes técnicas arquitectónicas y desarrollados conocimientos en astronomía e hidráulica.
Increíbles e inexplicables evidencias
Uno de los hechos más inexplicables, y que están presentes en casi todas las culturas que dejaron construcciones en piedra, son los precisos y tan perfectos cortes logrados en los bloques de piedra; piedras que además presentan diseños geométricos nunca antes vistos en la región.
Otra de las impresionantes construcciones realizadas por los Tiahuanaco es la llamada «Puerta del Sol», que nos hace pensar en una posible puerta dimensional utilizada por antiguos seres extraterrestres ligados sin duda al dios Wiracocha, el cual aparece tallado en la «Puerta del Sol».
Investigaciones del arqueólogo Arthur Posnanky han demostrado que en templos de la cultura Tiahuanaco se han encontrado bloques de piedra pulida con hileras de pequeños agujeros redondos, los cuales se cree que podrían haber servido para sujetar algo. Años más tarde en1943, durante una conferencia de prensa Posnanky presentó en un loque de piedra de Tiahuanaco con cinco clavos de oro incrustados. Posnanky concluyó que aquellos clavos servían para sujetar grandes y pesadas láminas de oro las cuales cubrían las paredes de los templos Tiahuanaco.
Los Annunaki y su conexión con Tiahuanaco
Los Annunaki se supone que fueron un grupo de extraterrestres que llegaron a la tierra hace miles de años en búsqueda de oro; estos serían los mismos extraterrestres que se habrían establecido en las cercanías al lago Titicaca, en donde se habría erigido una increíble civilización basada en la extracción y en el procesamiento de oro y otros valiosos metales. Según Zecharia Sitchin, defensor de la teoría de los antiguos dioses Annunaki, el objetivo de la explotación minera en aquella región habría sido revestir los muros del templo de Kalasasaya con oro para dar una majestuosa bienvenida a Anu, gran jefe Annunaki, y el utilizar dicho mineral para salvar la atmósfera de su planeta Nibiru. Además Kalasasaya habría servido, entre otras cosas, de observatorio astronómico para determinar el regreso a la Tierra del líder de los Annunaki.
Culturas Tiahuanaco e Inca, compartiendo un mismo origen
Se ha logrado establecer por medio de historiadores y manuscritos antiguos que la cultura Tiahuanaco habría sido la predecesora de la gran cultura Inca.
La leyenda de la fundación del imperio incaico afirma que el primer Inca Manco Cápac y su pareja Mama Ocllo salieron de las profundidades del lago Titicaca y establecieron el mencionado imperio al hundir un bastón de oro en el terreno aledaño. Este relato o más bien, como yo suelo llamarle, metáfora podría dar cuenta de dos seres, supuestos extraterrestres, que luego de salir de alguna base submarina en el lago Titicaca habrían fundado el famoso imperio.
Otros supuestos orígenes y conexiones extraterrestres de la cultura Tiahuanaco e Inca
Según el conocido cronista Inca Garcilazo de la Vega, en su obra «Comentarios reales» narra como el Padre Sol, por amor a sus hijos, envió a la tierra a su hija, en un rayo de plata. Este ser femenino descendió sobre la Isla del Sol, en el Lago Titicaca; y con el objetivo de ayudar a los habitantes de esa zona y enseñarles a urdir la lana, mejores técnicas de siembra y un mejor y apropiado uso de los metales.
Por otro lado el Biólogo español García Beltrán, descendiente directo del anteriormente mencionado Inca Garcilaso de la Vega, del cual se dice habría heredado todos los documentos inéditos pertenecientes anteriormente a su antepasado, dio a conocer sorprendentes hechos que según él le pertenecían a Garcilazo.
Este sería uno de los extractos de los que dio a conocer García Beltrán y que vale la pena difundir por las reveladoras frases que contiene:
“En la era Terciaria, cuando ningún ser humano existía aún en nuestro planeta, poblado sólo de animales fantásticos, una aeronave brillante como el oro viene a posarse sobre la Isla del Sol del lago Titicaca».
”De la nave descendió una mujer, que se parecía a las mujeres actuales de los pies a los senos; pero tenía la cabeza en forma de cono, grandes orejas y manos palmeadas de cuatro dedos».
”Su nombre era ‘Orejona’ y venía del Planeta Venus, en donde la atmósfera es más o menos análoga a la de la Tierra».
”Sus manos palmeadas indicaban que existía agua en abundancia en su planeta original y desempeñaba un papel primordial en la vida de los venusinos».
” (…) Un día, cumplida su misión de formar una nueva raza, Orejona volvió a emprender vuelo en su astronave. Sus hijos, ulteriormente procrearon, dedicándose sobre todo al destino de su padre tapir, más en la región del Titicaca una tribu que permaneció fiel a la memoria de Orejona desarrolló su inteligencia, conservó sus ritos religiosos y fue el punto de partida de las civilizaciones pre incaicas».
”He ahí lo que está escrito en el frontispicio de la puerta del Sol en Tiahuanaco.”
Seres de piel blanca y cabellos rubios presentes en el Perú antiguo previo a la conquista
En la tradición andina siempre se habla, también, de que en torno a Tiahuanaco existió una gran cultura formada por una casta de hombres blancos que dejaron descendencia en el linaje de los incas.
Uno de los cronistas de la conquista del Perú, don Pedro Pizarro, comenta al respecto:
“Las mujeres nobles son gratas de verse; se saben hermosas y en efecto lo son. Los cabellos de hombres y mujeres son rubios como el trigo y ciertos individuos tienen la piel más clara que los españoles…
”En esa comarca he visto una mujer y un niño, cuya piel era de una blancura inhabitual. Pretenden los indios que se trata de descendientes de los ídolos (dioses).”
Y, en los “Comentarios Reales”, el Inca Garcilaso de la Vega, insiste en que los hijos del Dios Sol fueron reconocidos como divinos por los indios “por sus palabras y por su tez clara”.
De lo narrado por los cronistas de la conquista y por sus comentaristas, se desprende que a Tiahuanaco se le reconoce una gran antigüedad, que sería la primera civilización propiamente tal que hubo en la Tierra; que en su fundación habrían intervenido seres llegados de otro planeta —específicamente Venus—; que necesitaban vivir a gran altura sobre el nivel del mar; que dichos fundadores de Tiahuanaco eran de raza blanca; que habría existido una mítica ciudad subterránea bajo Tiahuanaco para permitir adecuadas condiciones de vida a sus habitantes, dada la frialdad de la temperatura. De atender a la tradición indígena, dichos habitantes tuvieron para ellos calidad de dioses.
Además, está ya comprobado que las personas que viven a gran altura tienen un color de sangre más azulado, debido a la escasez de oxígeno que allí existe. Entre los mitos de casi toda la humanidad, siempre se ha hablado que la nobleza es de “sangre azul”.
Estas son solo algunas de las abundantes evidencias que revelan una conexión existente entre nuestras culturas antiguas y razas extraterrestres, que al parecer el paso de los siglos ha ocultado; pero como descendientes y herederos de este gran legado es nuestro derecho conocer la verdadera historia y nuestro deber difundirla.
Estamos sentados sobre la verdad y no queremos o nos impiden agacharnos a verla…