Por segunda vez en menos de cinco meses, los seguidores del predicador estadounidense Harold Camping aguardarán este viernes el fin del mundo.
Camping consiguió una inusitada atención mundial cuando predijo que el pasado 21 de mayo se produciría un terremoto global y que solo los verdaderos creyentes se salvarían.
Bueno, su predicción quedó en nada y este líder religioso de seclaró estupefacto y confesó su error, pero precisó que había releído la Biblia y que la fecha del Juicio Final se produciría en realidad este viernes 21 de octubre.
Como sucedió en mayo, humoristas televisivos y usuarios de internet han ridiculizado la profecía de Camping.
Un grupo de ateos de Seattle anuncia en su sitio web que invitan a todo el que lo desee a pasar la noche del viernes viendo una película sobre el Apocalipsis, con palomitas de maíz y refrescos.
Sin embargo, las predicciones de Camping no generan burlas en algunos sectores. Algunos líderes y publicaciones cristianas protestantes han advertido que este tipo de profecías son «embarazosas» para la mayoría de los creyentes.
«Harold Camping le está haciendo un gran daño al cristianismo», afirmó Glenn Hill, pastor retirado de Carolina del Norte.
El mensaje de Camping no generó gran expectación, pero sus oyentes no dejan de sintonizar su programa de radio, que es emitido por 65 emisoras en todo el país.
A pesar de que los medios no han informado de manifestaciones de sus seguidores como las que se produjeron en mayo, algunos de ellos han dicho que siguen creyendo en él.
De hecho, el error en la profecía del 21 de mayo no era el primero de este predicador, que lleva décadas en las ondas y que en el pasado anunció que el fin de los tiempos se iba a producir en 1994.
Por segunda vez en menos de cinco meses, los seguidores del predicador estadounidense Harold Camping aguardarán este viernes el fin del mundo.
Camping consiguió una inusitada atención mundial cuando predijo que el pasado 21 de mayo se produciría un terremoto global y que solo los verdaderos creyentes se salvarían.
Bueno, su predicción quedó en nada y este líder religioso de seclaró estupefacto y confesó su error, pero precisó que había releído la Biblia y que la fecha del Juicio Final se produciría en realidad este viernes 21 de octubre.
Como sucedió en mayo, humoristas televisivos y usuarios de internet han ridiculizado la profecía de Camping.
Un grupo de ateos de Seattle anuncia en su sitio web que invitan a todo el que lo desee a pasar la noche del viernes viendo una película sobre el Apocalipsis, con palomitas de maíz y refrescos.
Sin embargo, las predicciones de Camping no generan burlas en algunos sectores. Algunos líderes y publicaciones cristianas protestantes han advertido que este tipo de profecías son «embarazosas» para la mayoría de los creyentes.
«Harold Camping le está haciendo un gran daño al cristianismo», afirmó Glenn Hill, pastor retirado de Carolina del Norte.
El mensaje de Camping no generó gran expectación, pero sus oyentes no dejan de sintonizar su programa de radio, que es emitido por 65 emisoras en todo el país.
A pesar de que los medios no han informado de manifestaciones de sus seguidores como las que se produjeron en mayo, algunos de ellos han dicho que siguen creyendo en él.
De hecho, el error en la profecía del 21 de mayo no era el primero de este predicador, que lleva décadas en las ondas y que en el pasado anunció que el fin de los tiempos se iba a producir en 1994.
En mayo, los medios de Estados Unidos informaron que algunos de sus seguidores se habían arruinado al vender sus propiedades para donarlas a la campaña de Camping.
Con lo recaudado, el profeta compró espacios en 2.000 vallas publicitarias de todo el país en las que difundió su mensaje.
También se informó de algunos suicidios tanto en Estados Unidos como en el extranjero, los que son investigados por su presunta relación con la profecía.
«Sin duda, tras su error, ha perdido credibilidad entre sus seguidores», opina Hill, que se siente molesto porque continúan las burlas.
«Cuando los comediantes se mofan de Camping y sus seguidores, los cristianos en conjunto quedamos retratados como estúpidos».En mayo, los medios de Estados Unidos informaron que algunos de sus seguidores se habían arruinado al vender sus propiedades para donarlas a la campaña de Camping.
Con lo recaudado, el profeta compró espacios en 2.000 vallas publicitarias de todo el país en las que difundió su mensaje.
También se informó de algunos suicidios tanto en Estados Unidos como en el extranjero, los que son investigados por su presunta relación con la profecía.
«Sin duda, tras su error, ha perdido credibilidad entre sus seguidores», opina Hill, que se siente molesto porque continúan las burlas.
«Cuando los comediantes se mofan de Camping y sus seguidores, los cristianos en conjunto quedamos retratados como estúpidos».Por segunda vez en menos de cinco meses, los seguidores del predicador estadounidense Harold Camping aguardarán este viernes el fin del mundo.
Camping consiguió una inusitada atención mundial cuando predijo que el pasado 21 de mayo se produciría un terremoto global y que solo los verdaderos creyentes se salvarían.
Bueno, su predicción quedó en nada y este líder religioso de seclaró estupefacto y confesó su error, pero precisó que había releído la Biblia y que la fecha del Juicio Final se produciría en realidad este viernes 21 de octubre.
Como sucedió en mayo, humoristas televisivos y usuarios de internet han ridiculizado la profecía de Camping.
Un grupo de ateos de Seattle anuncia en su sitio web que invitan a todo el que lo desee a pasar la noche del viernes viendo una película sobre el Apocalipsis, con palomitas de maíz y refrescos.
Sin embargo, las predicciones de Camping no generan burlas en algunos sectores. Algunos líderes y publicaciones cristianas protestantes han advertido que este tipo de profecías son «embarazosas» para la mayoría de los creyentes.
«Harold Camping le está haciendo un gran daño al cristianismo», afirmó Glenn Hill, pastor retirado de Carolina del Norte.
El mensaje de Camping no generó gran expectación, pero sus oyentes no dejan de sintonizar su programa de radio, que es emitido por 65 emisoras en todo el país.
A pesar de que los medios no han informado de manifestaciones de sus seguidores como las que se produjeron en mayo, algunos de ellos han dicho que siguen creyendo en él.
De hecho, el error en la profecía del 21 de mayo no era el primero de este predicador, que lleva décadas en las ondas y que en el pasado anunció que el fin de los tiempos se iba a producir en 1994.
En mayo, los medios de Estados Unidos informaron que algunos de sus seguidores se habían arruinado al vender sus propiedades para donarlas a la campaña de Camping.
Con lo recaudado, el profeta compró espacios en 2.000 vallas publicitarias de todo el país en las que difundió su mensaje.
También se informó de algunos suicidios tanto en Estados Unidos como en el extranjero, los que son investigados por su presunta relación con la profecía.
«Sin duda, tras su error, ha perdido credibilidad entre sus seguidores», opina Hill, que se siente molesto porque continúan las burlas.
«Cuando los comediantes se mofan de Camping y sus seguidores, los cristianos en conjunto quedamos retratados como estúpidos».