Los niños se distraen con un ruido, una luz o con sus propios pensamientos. Es complicado para ellos concentrarse y esto provoca que demoren un poco a la hora de aprender conocimientos. No son niños nerviosos especialmente, incluso pueden ser niños tranquilos que sin embargo, van a un ritmo más lento porque se despistan y no prestan la suficiente atención.
¿Cómo manejar esto?
No resulta similar un niño distraído que un niño con déficit de atención (TDA/H). El Déficit de atención es un problema que afecta a una proporción mínima de niños. La diferencia radica en que el TDA/H se produce cuando el problema de concentración del niño es sumamente severo y no evoluciona.
Los síntomas aparecen antes de los siete años y se dan tanto en el colegio como en el hogar. El diagnóstico se da luego de una serie de pruebas pues se trata de un problema en algunas áreas del cerebro y se realizan con el apoyo de psiquiatras, neurólogos y pediatras.
Sin embargo, la mayoría de los niños distraídos no sufren TDA/H. Sólo se trata de problemas de concentración. Pueden ser soñadores o despistados aunque también niños inquietos.
¿Cómo ayudar a los niños distraídos?
Cuando un niño se distrae con más facilidad de lo normal, lo nota en el aprendizaje. Adopta conocimientos de forma más lenta y las tareas de la casa se vuelven una pesadilla para él y para los padres. Pero, no es conveniente regañar al niño ni mostrarse molesto pues esto implicaría que el niño se sienta fracaso y culpable.
Tenga en cuenta estos consejos:
- Asegúrese que duerma lo suficiente. Hay niños que duermen mucho pero mal y al final no pueden rendir bien porque están cansados.
- Mírele a los ojos mientras hable con él. Es la forma más correcta de asegurarse que lo está atendiendo.
- Cuando trabajen en casa, cree una zona de trabajo sin elementos distractivos. Aparte las luces, juguetes y otros objetos que puedan captar su atención.
- No deje las tareas más difíciles para el final. El niño podría perder el interés en esforzarse.
- Anímele a que resuma en frases cortas lo que acaba de hacer. Así lo obligará a concentrarse y hacer memoria.
- Y lo más importante, tenga mucha paciencia. La concentración se trabaja poco a poco y los resultados no se darán de la noche a la mañana.