La lección de Franco Navarro y la gloria alba

El fútbol peruano tiene un nuevo campeón. La Universidad San Martín de Porres obtuvo el tercer título de su historia al vencer con un global de 3-2 al León de Huánuco en la final del Campeonato Descentralizado.

Tenía pensado iniciar hablando de la enorme campaña del equipo santo, pero debo hacer un giro de 180 grados y aplaudir a Franco Navarro. En él, primó más la ética que el fútbol y respetó la tarjeta roja que recayó sobre Gustavo Rodas, antes de alinearlo tras la habilitación de la ‘Comisión de Justicia’.

Personalmente, me une un lazo afectivo con Huánuco, pues mi sangre es huanuqueña y la habilitación a Rodas me hizo pensar en que el título era posible para el equipo crema. Pero también pensé que no era lo correcto y que dentro de los códigos íntimos que hay en el fútbol, el argentino no debía alinear ayer en el ‘Monumental’. Franco Navarro, un entrenador correcto y mejor persona, decidió darle un ‘cachetada’ a esa impresentable Comisión de Justicia y se la jugó por presentarse ante la San Martín sin su jugador estrella, el guiá en el camino de León hacia la final y la Copa Libertadores. El ‘Pepón’ Navarro nos enseñó que en el Perú, quedan pocas personas honradas, decentes, y que le da más importancia a la razón que al beneficio, en este caso, futbolístico.

Con la decisión de Navarro, la CJ debe de presentar su carta de renuncia en el acto. Escuchaba al ex árbitro Gilberto Hidalgo que Don Pedro Falcón, un símbolo del arbitraje peruano, dijo en su momento que ”El cáncer del Fútbol Peruano es la Comisión de Justicia”. Y es verdad, pues lo que hicieron estos tipos, realmente no se ha visto en el mundo. ¿Porqué decidieron perdonar a Gustavo Rodas? ¿Qué pensaron al momento de borrar su suspensión? El propio volante aceptó haber caído en indisciplina en el partido disputado en Huánuco… Con la versión de Rodas ¿Era necesario el perdón por parte de esta mal llamada comisión? ¿Saben que en el fútbol existe la Tarjeta Roja? ¿No tienen respeto por la labor del árbitro del partido?

 

 

Dejando de lado la barbaridad de la Comisión de Justicia, pasemos al fútbol. Universidad San Martín cerró con todos los honores un campeonato dominado de principio a fin. Una prueba más de que con un trabajo serio y con mucho perfil bajo (Ojo Alarcón) se pueden lograr cosas importantes. En seis años de existencia, el equipo albo ha sido campeón en tres oportunidades y ya se está acostumbrando a ganar, a pelear arriba con un equipo que cuenta con jugadores experimentados jóvenes y extranjeros que si marcan la diferencia (con la excepción de un tal Brian Rodríguez).

La Universidad San Martín ha sabido ser superior al resto de equipo durante la temporada. El éxito reposa en la sapiencia de un experimentado entrenador como el ‘Maño’ Aníbal Ruíz, un estratega que llegó faltando días para el inicio del Descentralizado y que supo transmitir su mensaje a los jugadores, los mismos que han alcanzado un nivel superior al resto de equipos en los 46 partidos del año.

Dentro de esos jugadores, es preciso destacar al tridente ofensivo integrado por Héber Arriola (24), Germán Alemanno (18) y Pablo Vitti (12). A ellos se le suma el experimentado Pedro García (10), y entre los cuatro anotaron 64 de los 87 goles anotados durante la campaña. Una cifra importante para un equipo que acumuló 92 puntos, a once de diferencia de León de Huánuco, el subcampeón.

Considero que la San Martín ganó el título en el partido de ida disputado en Huánuco. Aprovechó la demora en los cambios por parte de Franco Navarro y el cansancio de jugadores como Carlos Zegarra y Luis Perea para anotar el tanto del empate en los pies de Germán Alemanno. Pesó más el oficio de un equipo sólido y con jugadores importantes en la banca de suplentes, algo que no tuvo León de Huánuco en la final. Jugar una final no era lo mismo que jugar una Liguilla y eso, pesó en ambos partidos. Pero no quiero dejar de reconocer la labor de Franco Navarro al frente del equipo huanuqueño…

Decía Daniel Peredo en su programa de TV en cable, que si otro técnico agarra este León, no lo lleva a la final como lo hizo Navarro. El ‘Pepón’ supo juntar la experiencia de Guadalupe, Ferrari, Zegarra y Flores, con la frescura de Peña y Chávez. Un gran acierto de Franco fueron las contrataciones de Gustavo Rodas y Luis Perea, pilares del León 2010 y que sellaron una temporada inolvidable. No hay que olvidar tampoco la confianza que tuvo Navarro en Calheira, resistido en su paso por la U, pero que recobró la memoria goleadora con otra camiseta crema.

San Martín y León de Huánuco disputaron una final que de por sí, era totalmente inesperada, teniendo en cuenta que el Universitario campeón 2009 mantenía su misma base y que Alianza Lima trasladaría lo hecho en la Libertadores al torneo local. Albos y cremas, con justicia, se consagraron como los mejores de la temporada, que estuvo llena de momentos emotivos, pero también de momentos amargos como el abandono de los dirigentes a Cienciano, Total Chalaco y José Gálvez, los líos dirigenciales en Alianza y Universitario y lo último de la Comisión de Justicia. Queda por esperar la temporada 2011, y esperamos que San Martín limpie su imagen tras el horror de la Sudamericana, León de Huánuco cumpla un papel digno y que Alianza y Universitario borren el pobre 2010.

Y para cerrar, una frase de Franco Navarro, que quedará en la posteridad: ”Quizás nunca vaya a salir campeón, pero mi trabajo siempre lo haré con dignidad”.