¿Cómo cuidar al Husky Siberiano en Verano?

Si de canes hablamos, uno de los que más sufre en este verano es sin duda, el Husky Siberiano, una raza procedente de la gélida Siberia y que son adaptados a temperaturas de los más fríos inviernos.

Cuidarlos requiere de precauciones típicas para cualquier mascota en verano, aunque con un poco más de atención.

El Husky es un perro que posee una densa capa de pelo que lo protege de las inclemencias del invierno, pero cuando llega el verano, empieza a perder pelo y se queda con la capa superficial del mismo. Es algo normal pues de esta forma, el can puede soportar el calor estival y por ello, se le debe cepillar el pelaje por lo menos dos veces al día.

Mientras más rápido mude el pelo, mejor se adaptará el Husky al Verano. Esta muda es normal durante esta época porque se renueva la capa interna del cabello, que es lo que lo protegerá del frío y por ello, es normal tambipen que el pelo se empiece a aclarar mientras se esté mudando.

A medida que se acerque el invierno, el Husky tendrá la cantidad de pelo acostumbrado e irá recuperando su color habitual.

Como en las personas, las mascotas sufren con el calor, y para darse cuenta de ello, es importante prestar atención en la respiración del can, que será aceleradam jadeante y con la lengua afuera.

Para cuidar al Husky Siberiano durante el verano, se le debe dar abundante agua y que siempre tenga un bebedero a su alcance, con agua fresca pero sin hielo que podría quemar el esófago del perro.

Otra forma de refrescar a la mascota es tirándole agua con una manguera, lo que será de enorme alivio para él. No se le debe bañar con champú de manuera frecuente, por que el Husky acumula grasa debajo de la dermis para luego en invierno protegerse del frío.

Si el perro se pone difícil para la comida…

Resulta que siempre nos quejamos cuando nuestro perro barre con la cocina y come hasta más de la cuenta. Tienen fama de comer todo lo que se pone en el recipiente, pero hay casos en que no es así.

Hay casos en que el perro muestra indiferencia ante la comida, pero existen maneras de conseguir que el momento de comer sea agradable.

Encontrar el sabor adecuado:

Algunas personas compran comida balanceada pensando siempre en una marca en concreto, pero sin pensar si le gustará o no a la mascota. Lo ideal es ir probando nuevas marcas o combinaciones hasta encontrar uno que sea del agrado del can.

No emplear comida «humana»:

Están acostumbrados a comer por ejemplo, camote. Pero, no es fácil onvencer a los perros para que dejen de comer nuestros alimentos y vuelvan a ingerir pienso. Por ello, es recomendable sustituir poco a poco la comida humana por la canida, dándole al principio el 80% de la comida a la que esté acostumbrado y el 20% de la comida que quiere que tome

Estar a su lado:

Su predilección por la comida humana se debe al deseo de estar cerca a su dueño. Por ello, poco a poco se debe ir apartando un poco más, para que así el perro aprenda a comer solo, sin necesidad de una compañía humana al lado.

El olor:

El aroma de la comida tiene mucho que ver con el encanto culinario, así que debe elegir los alimentos que huelan mucho, como los que vienen en conserva, seguidos por los semideshidratados. Los alimentos en conserva contienen carne, pescado y cereales, algunos más aromáticos que otros.

Limitar la duración de comidas:

Algunos canes ven la comida y se alejan por que saben que ese mismo plato  otro mejor, estará allí la próxima vez que se acerquen. Si le da de comer siempre a la misma hora, podrá “controlar” su apetito, por lo que permanecerá con hambre. Retírele el plato pasada media hora si no ha comido nada,.

Principales enfermedades en los perros

No lo percibimos de momento, pero hay casos en que nuestros perros manifiestan tanto dolor que poco o nada sabemos lo que en realidad les aqueja. Estos son los principales males que atacan a nuestros canes y que requieren de una inmediata intervención de un veterinario.

Enfermedad Síntomas Tratamiento
Alergia a la picadura de pulga Enrojecimiento de la piel, heridas sangrantes con costras

y lesiones debidas a la irritación por el rascado y mordedura

en la zona que rodea el punto de picadura.

Usar champús para perros, cepillarlo regularmente para prevenir

motas de pelo. Llevarlo al veterinario para que le aplique un antipulga.

limpia y aspira tu casa, manteniéndola ventilada. Limpia también su cama

Distémper (común en perros no vacunados) Falta de apetito, depresión, fiebre, diarrea, vómito y conjuntivitis Depende de la constancia en la aplicación del tratamiento indicado por el

veterinario. Si llega a recuperarse, tendrá secuelas nerviosas y la nariz

quedará agrietada. Pese a ello vivirá una vida casi normal.

Otitis (inflamación del conducto auditivo) Sacude y razca mucho la cabeza, acumulación de pelo y cerumen, dolor,

mal olor y mucho pelo en las orejas.

Consultar al veterinario para un buen tratamiento, pues este mal puede ser como

consecuencia de la presencia de bacterias y hongos.

Sarna Costras al inicio de las orejas y los codos que luego, se van extendiendo.

Aparecen costras rojizas y amarillentas, que causan mucha comezón y

heridas. En los casos crónicos, la piel se engruesa.

Baños con champú antiséptico, dar un antibiótico recetado por un veterinario. Al ser

una enfermedad contagiosa, se debe tratar a todos los perros en contacto con el

enfermo aunque no presenten síntomas. Desinfecte cobijas, colchones y ropas del perro.

Traquebronquitis infecciosa Tos, moco transparente y sin olor o moco de color amarillento, fiebre y

nariz reseca.

Limpia y desinfecta con lejía el área donde vive el perro y llevalo al veterinario, pues no es

recomendable la automedicación en estos casos.

Parvovirus canino Vómito, dolor abdominal, fiebre, abdomen caliente, nariz reseca,

estreñimiento o diarrea.

Consultar con el veterinario inmediatamente para que dé un diagnóstico y

tratamiento a seguir.

El «Golpe de Calor» en nuestros perros

El verano es un total fastidio para nosotros, más aún con los altos índices de temperatura que terminan por sofocarnos y hasta por ponernos de mal humor. ¿En algún momento de la estación hemos llegado a pensar en lo que sienten los perros ante la presencia del astro rey?.

Sin duda, el calor es uno de los grandes problemas al que está expuesto nuestro perro, pues es un ser mucho más sensible al calor que nosotros, los humanos. Ellos, eliminan esa horrible sensación mediante el jadeo y el sudor que botan por las zonas aisladas de pelo o por las almohadillas que están en sus patas.

Hay que considerar lo peligroso que resulta para el perro, el «golpe de calor», que es el aumento de la temporada corporal en los canes, como consecuencia del calor y de la intensidad que éste tiene durante la temporada.

El fuerte calor hace que los perros pierdan poco a poco con sus reservas de azúcar y sales minerales, que podrían hacer colapsar a nuestras mascotas en apenas 15 minutos. Es precisamente que ellos deben estar en lugares abiertos y evitar espacios reducidos o de poca luz como las habitaciones, coches y otros ambientes.

¿Cómo sabemos si nuestro perro tiene el llamado golpe de calor? Tengamos en cuenta lo siguiente:

  • Está perezoso y no tiene mucho interés en moverse
  • Temblores musculares e que vienen acompañados de vómitos
  • Aumento del ritmo cardíaco.
  • Se tambalea constantemente.
  • Jadeo o su respiración es constante y muy rápido.
  • El perro parece atontado.
  • Babeo espumoso que acelera la deshidratación.
  • Aumenta de la temperatura de su cuerpo.

Si presenta estos síntomas y el perro no es tratado a tiempo con un veterinario, puede presentar:

  • Aparición de pequeñas manchas de sangre en la piel.
  • Padecimiento de una hemorragia gastrointestinal.
  • Sufrimiento de insuficiencia hepática o renal.
  • Verse afectado por un edema cerebral.
  • Fallo de los órganos.

¿Cómo controlar el golpe de calor?

Si nos encontramos con el caso del golpe de calor en los perros, se le debe bajar la temperatura de su cuerpo colocándolo en un sitio fresco y muy ventilado, aplicando frío en zonas importantes como la cabeza, el cuello, las axilas y las ingles. Con este ejercicio, se refresca la sangre que va hacia el cerebro y evitamos un daño cerebral en nuestra mascota.

Si queremos que el frío avance rápido en nuestro perro, podemos ampararnos en un ventilador o pasarle cubos de huelo por la nariz, las axilas y otros lados del cuello.

Más allá del cuidado casero, es importante acudir al médico veterinario, para que someta al perro a varios exámenes y administrarle las medicinas adecuadas para una rápida recuperación.

Medidas de prevención:

  • Mantener hidratado al perro. Suministrarle agua varias veces al día es una salida importante para evitar que padezca de golpe de calor.
  • Si vamos a salir de paseo en familia, se debe evitar dejar al can al interior del vehículo y cerrado.
  • Sacar a pasear al perro en momentos donde el sol no sea muy intenso. Hay que buscar el momento más fresco del día para recién salir a dar una vuelta con nuestra mascota.
  • Si tenemos la costumbre de dejar al perro en el jardín, por lo menos se le debe acondicionar algún tejado que le sirva como sombra en los momentos más calurosos del día.

 

¿Cómo preparar una adecuada comida casera a los perros?

La lógica indica que el alimento balanceado es la salida idónea de muchos dueños para mantener a sus perros nutridos, pero también se puede optar por darles comida casera hecha por ellos mismos.

Hace años, los perros eran alimentados con lo que había ante la ausencia de los alimentos alanceados. Surgían una gran variedad de comidas como carne, arroz, camote, huesos y otros alimentos que en algunos de los casos no eran del agrado de ellos.

Cuando alimentamos al perro con las sobras de nuestra comida, no creamos en ellos un hábito saludable del todo. Los alimentos elaborados para humanos no contienen las proporciones y equilibrio más adecuado para las mascotas Algunos consejos son los siguientes:

Hay que recordar que los perros necesitan de una dieta balanceada y equilibrada. Debe contener cerca de un 40% de proteína animal (carnes), un 30% de vegetales variados y un 30% de harina. A partir de estas proporciones se podrá nutrir bien al perro en cada plato agregando ingredientes extra más adecuados para cada ocasión como hierbas, aceites o grasas.

Entre las proteínas animales se pueden emplear varios tipos de carnes. La de vaca es una de las preferidas pero también se pueden variar con aves de corral (pollo, pavo y otros). También se le puede agregar arroces específicos y algunas legumbres.

Se debe cumplir con las condiciones sanitarias del alimento para perro. Mantener refrigerados tanto los ingredientes como también los platos ya elaborados y cocidos. No se deben conservar por más de tres días.

Al igual que lo que sucede con las personas, los perros tienen gustos propios. Debes variar los ingredientes para determinar cuáles son de mayor agrado para el can. Y por último, intercala los alimentos elaborados en forma casera con alimentos balanceados para elevar su nivel nutricional.

El sobrepeso en los perros

Dedicarle tiempo a nuestras mascotas no solo implica jugar con ellos, sino cuidarlos también en su alimentación, uno de los grandes problemas en los perros.

La obesidad en los canes se propicia por la sobrealimentación combinada con la falta de energía. Muchas veces, nos equivocamos al querer compensar el aburrimiento y la falta de atención al can con una dosis extra de alimento que el perro de por si no puede rechazar. Con ello, tranquilizamos a la mascota sin saber las consecuencias que puede sufrir en el futuro.

¿Cómo evitar la obesidad en los canes?

Lo más importante es prevenir y deshacerse de la idea de que ellos son más felices si se les da una mayor cantidad de comida.

De por si, los perros no piensan como los humanos.  Ellos pasan muchas horas solos y aburridos y la comida puede servir como un método para evitar que destruyan el hogar durante esa soledad, pero al mismo tiempo se les está convirtiendo en obesos sedentarios. El exceso de peso hace que el animal se sienta pesado y no tenga deseos de moverse, formando un círculo vicioso donde el animal come más y se mueve menos.

Si el perro debe permanecer solo durante la jornada, lo más recomendable es dejarle juguetes para que puedan morder a sus anchas mientras espera a su dueño o dueña. También se de debe compensar con paseos y juegos para que el animalito comprenda que el dejarlo solo en el día no se trata de un castigo sino de una circunstancia de la vida.

Cuando el  perro ya tiene sobrepeso, debe reducir su ración de comida y aumentar los niveles de ejercicio como en las caminatas, que ayudan a que el perro gaste energías y mejore su estado de ánimo.

Una alternativa importante es la alimentación natural. Ellos pueden comer verduras, que son una importante fuente de nutrientes, pero con pocas calorías. Para contrarrestar ello, se puede optar por una dieta de verduras y carnes magras, que podrán favorecer la pérdida de peso de nuestro perro.

¿Cómo tratar el temor en los perros?

Siempre se tiene presente que los perros son animales valientes y bravíos y que son capaces de defender a la familia y el hogar. Pero, al igual que los humanos, ellos también pueden sentir temor y ese defecto se puede superar.

Se pueden dividir dos temores en los perros: el social o el temor a los objetos inanimados como tormentas, cohetes o vehículos.

Temor social:

Los perros pueden temer a las personas, a otros perros o a otros animales si no reciben una sociabilización adecuada o si vivieron una traumática experiencia. Esto ocurre si el perro vive aislado y no tiene contacto con personas u otros animales durante el periodo de sociabilidad o más allá.

También podemos catalogar a los perros que hayan sufrido una experiencia traumática y que genera huida apenas ven a alguien. Y no necesariamente debe ser la propia persona que los destrató, la que interactúe con ellos.

Temor a objetos inanimados:

Los temores hacia objetos inanimados son frecuentes en los perros, como el miedo a los cohetes en épocas de fiestas navideñas y a los truenos. Este temor aparece cuando el perro es aún cachorro y suele empeorar con el tiempo.

Los perros que experimentan temores a los petardos presentan diversas reacciones, pueden mostrarse intranquilos, temblar, gemir, jadear, hasta experimentar un ataque de pánico genuino

¿Cómo actuar ante el temor en los perros?

Los problemas de temor son síntomas de que el perro no se siete bien y por lo tanto, es necesario intentar solucionarlos, por lo que deben ser evaluados correctamente.

Existen técnicas que pueden ayudar a controlar el temor en los perros, pero no se deben aplicar por nuestra propia cuenta. Se debe solicitar supervisión al veterinario.

Para enfrentar el temor a cohetes o truenos, hay dos técnicas básicas:

Terapia curativa: Busca eliminar el temor y para hacerlo, se utiliza la técnica de desensibilización, utilizando grabaciones de truenos y petardos. Esta técnica es compleja y requiere de supervisión veterinaria, aunque no siempre resulta como se espera, incluso puede ocasionar recaídas.

Terapia paliativa: Pretende controlar el temor en lugar de eliminarlo. Se trata de controlar la intensidad de la reacción, mediante el uso de medicamentos, que se le administran al perro en el momento en que aparece el estímulo o un poco antes. Esta terapia requiere rigurosamente control veterinario.

Además, podemos ampliar este proceso con estas medidas:

  • No acariciar al perro cuando demuestra temor. Porque esto reafirma la conducta temerosa.
  • Acariciar al perro cuando no muestra miedo. Es conveniente aprovechar los momentos en que la tensión afloja y el perro se relaja, para acariciarlo. Con esto le estamos indicando que es más beneficioso no mostrar temor.
  • Permitirle la retirada. Es una tendencia natural que el perro busque dónde esconderse cuando siente temor. En ese caso debemos dejarlo permanecer donde se siente a salvo (debajo de la mesa, la cama, detrás del sofá, etc.). no es buena idea forzarlo a salir, esto lo pondría más asustado.

Perros ideales para personas de la tercera edad

Los perros resultan una buena compañia para los grupos etarios, pero a pesar de cierta edad, empiezan a considerar otros elementos a al hora de escoger uno.

Por ello, se recomendia los mejores perros para la tercera edad, cuya característica fundamental debe ser su tamaña pequeño y manejable, además de su carácter.

Las personas de la tercera edad no cuentan con una energía ni fuerza como alguien joven, por lo que posiblemente no desean un perro fuerte y corpulento sino un compañero tranquilo y que se adapte a su ritmo de vida.

El Pug es una excelente opción ya que es pequeño y ligero, juguetón, de baja energía y requiere poco ejercicio. Son excelentes perros familiares, sumamente afectuosos y les gusta ser incluidos en todas las actividades de la familia. Son extrovertidos y amigables pero reticentes con los extraños. El Pug es un gran perro faldero e ideal para un adulto mayor.

Otras opciones son:

Poodle Miniatura: Con una expectativa de vida de 15 a 18 años, el Mini Poodle o Poodle Miniatura es una excelente opción para aquellos que deseen un perro familia con mucha energía, capacidad de aprendizaje y gran deseo de complacer. El Mini Poodle requiere mucha interacción con seres humanos por lo que es la opción ideal para personas retiradas que están en el hogar la mayor parte del tiempo.

Schnauzer Miniatura: Con una expecativa de vida de 12 a 15 años, el Schnauzer miniatura es una de las razas más juguetonas, inquisitivas, alegres y fieles de todas. Les encanta jugar pero también es sumamente obediente, gentil y ama el hogar. También disfruta mucho de estar rodeado de gente y generalmente es un buen perro guardián.

Shih Tzu:  Esta raza vive de 14 a 16 años y es dulce, gentil y pequeña que adora jugar y divertirse dentro de la casa. Es muy afectuoso con parientes y niños pequeños y requiere mucha compañía humana y atención. Sus necesidades de ejercicio son mínimas pero requiere ser peinado todos los días y una limpieza general cada 6 a 8 semanas.

Son algunas razas recomendadas. Se recomienda comprarlo a un criador acreditado con experiencia y buena reputación que se encargue de que sus cachorros sean sanos y bien tratados.

Perros ideales para niños que padecen alergias

Hay niños que desean tener un perrito con quien jugar, pero cuando padecen de alergia, es difícil para un padre de familia cumplirle ese deseo.

Se debe recordar que no existe un perro que no cause alergias, pero hay algunas razas que son más adecuadas para este tipo de situaciones. La gente, puede ser alérgica al pelo, caspa o saliva del perro, pero no sabe la raza que puede provocar dicho malestar.

Las razas que pierden menos pelo son más propensas a ser hipoalergénicas, ya que la caspa y la saliva se adhiere al pelo, por lo que no son liberadas en el ambiente, como por ejemplo el Perro Peruano (o Perro Sin Pelo).

La mayoría de los síntomas alérgicos pueden prevenirse con baños regulares e incluso las razas hipoalergénicas, pueden producir una reacción en una persona sensible si son bañadas con frecuencia. El tamaño puede ser un factor muy importante al determinar la hipoalergenicidad pues es posible que la superficie total del cuerpo del perro sea un mejor indicador de la cantidad de alérgenos que produce.

El ladrido excesivo de los perros puede contribuir a niveles más altos de dispersión de alérgenos, pues la saliva y la caspa son proyectadas desde el animal durante el ladrido. Por ello, las razas más pequeñas y que ladran mucho, podrían ser no ideales pese a su tamaño.

Otro dato importante es que bañar a los perros con frecuencia, ayuda a reducir la cantidad de proteína alérgica en el pelaje o la piel del pelo. Asear al perro al menos dos veces por semana, minimizará o eliminará la reacción alérgica de la persona al animal.

Aspirar el hogar, usar filtros de aire y restringir al perro de ciertos ambientes, controlan los alérgenos. También, el introducir el perro a una edad temprana disminuye la sensibilidad alérgica.

Existen algunas razas de perros para niños que sufren de alergias:

  • Perro Sin Pelo peruano
  • Poodle
  • Maltés
  • Yorkshire Terrier
  • Cockapoo
  • Kerry Blue Terrier
  • Coton de Tuléar

Juguetes apropiados para nuestros perros

Los juguetes para las mascotas, como sucede también con los niños, son toda una necesidad. Estos elementos permiten que los perros puedan liberar energía y reducir el grado de ansiedad que presentan.

Además, estos juguetes sirven para tranquilizar a nuestros perros, pues ayudan a mantener su mente activa y son excelentes para el adiestramiento, sin contar lo importante que son para su diversión.

Tipos de juguetes sin supervisión:

Los juguetes para perros que deben quedarse solos, deben ser resistentes y no contener elementos que puedan tragarse. Son apropiados los hechos de goma dura, que no se puedan romper fácilmente, pero que sean flexibles. Así, se evitará que la mascota trague fragmentos del juguete, algo que sería perjudicial para ellos.

Un detalle importante debe ser el tamaño del juguete para que el perro no se los pueda tragar. No esta de más que se consulte al médico veterinario antes de comprar los juguetes, para obtener aquellos que estén acorde con el tamaño, la edad y la raza del perro.

Los juguetes comestibles también son atractivos y vienen de diferentes formas y tamaños. Son fabricados de productos naturales e incluyen nutrientes para la mascota. Estos juguetes les brindan muchas horas de felicidad mientras los mastican, pues su sabor les resulta muy agradable y calma el apetito de un perro aburrido por la soledad.

Entre estos juguetes tenemos pelotas y otras variantes, teniendo en claro que deben ser de goma o de plástico, sin que sean duras pues el perro podría comer algún fragmento y herirse gravemente.

Tipos de juguetes con supervisión:

En este caso, son los juguetes que presentan materiales tóxicos y los materiales que se fragmentan en trozos filosos que puedan cortarlos.

Por ello, cuando el perro consigue destrozar el juguete, se le debe quitar inmediatamente del hocico para que evite tragar fragmentos del mismo.

Es importante no darle al perro objetos prestados como cuerdas o pelotas de tenis y fútbol. Los juguetes que le entreguemos, tienen que ser suyos para que pueda disfrutarlos, romperlos o estropearlos.

Nunca se le debe dar al perro un juguete que cause peligro a su integridad u objetos que pueda romper. Los juguetes infantiles tampoco son aptos para ellos, pues son fáciles de romper (como los peluches) pues algunos poseen rellenos que el perro comería al instante, provocando una obstrucción intestinal o incluso morir asfixiado.