Fueron tres puntos engañosos

Se volvió a sumar de a tres en el Torneo del Inca pero nuevamente se volvió a quedar una imagen opaca del desenvolvimiento del equipo. Alianza (por ahora) viene sacando los resultados pero el trámite del partidos es distinto. ¿Será el partido ante Sporting Cristal la verdadera prueba de fuego para Guillermo Sanguinetti?

Ante Real Garcilaso, Alianza Lima salió con el siguiente once:

mi alineacion

 

Vimos un Alianza fiel al pelotazo, sin ideas claras para llegar y vulnerar a un equipo que jugó con varios suplentes debido a su participación en la Copa Libertadores de América. Si no se pudo ganar con contundencia ante San Simón y el cuadro cusqueño ¿qué será del partido ante un Sporting Cristal en gran nivel?

Nuevamente la pelota parada salvó a Alianza de un resultado que no sea el triunfo. Luis Trujillo apeló a su buen remate de zurda y con la complicidad del arquero Pretel, le dio la victoria al equipo casi en los últimos minutos del partido. Trujillo fue el más destacado el último sábado pues antes del gol tuvo dos opciones claras de anotar, claro, apelando al remate de larga distancia.

¿Qué ocurre? No existe un nexo que sepa pasar la pelota en el medio campo. En teoría, esa debería ser la función de Gabriel Costa, pero el uruguayo, por momentos, aparece como un segundo delantero y se olvida de la función de creación que debe cumplir. En cristiano, creemos que hace falta un jugador como Henry Quinteros (en su mejor época claro está).

1780737_835697146444074_759090917_n

Aguirre y Landauri son los volantes por bandas. No lo hacen mal pero hace falta ser más profundos a la hora de escalar al área rival y sobre todo esperar el momento idóneo para soltar el pase al corazón del área.

Otro problema de cara al partido ante los «cerveceros». No jugará Mauro Guevgeozián por suspensión y su lugar será tomado por Juan Diego González Vigil. Debería ser Mauricio Montes pero su caso, al igual que el de Víctor Cedrón, aún no encuentra una solución por lo que el «Lobo» será el «9» este fin de semana en el Estadio Nacional.

Sanguinetti dice que está satisfecho con lo que viene haciendo Alianza hasta el momento y creo que está equivocado. En la tribuna de Matute, el descontento fue general con el rendimiento del plantel. Hay cosas que reconocer que son positivas, como el físico de los jugadores y la lucha que le ponen a cada pelota (abusando un poco de las faltas) pero en proceso de juego, en ideas y elaboración aún estamos lejos de lo que un equipo con la historia de Alianza tiene que ofrecer. Ya van cuatro fechas y el trabajo de Sanguinetti aún no tiene una nota aprobatoria.

[yframe url=’http://www.youtube.com/watch?v=7CN0slNKn_4′]

 

Descansa en paz Walter

Luego de 29 meses, la tensa espera de una familia llegó a su final. El largo camino de un admirado padre concluyó que aquellos malos hinchas que acabaron con la vida de su hijo recibieron la pena máxima por parte de la justicia. Hoy por fin, más de uno puede decir: Descansa en paz, Walter.

65603120111126220049

David Sánchez Manrique Pancorbo («Loco David») y Jorge Roque Alejos («Cholo Payet») fueron condenados a 35 años de cárcel por haber provocado la muerte de Walter Oyarce Domínguez el 24 de setiembre de 2011 desde uno de los palcos del Estadio Monumental de Ate.

Me reafirmo en lo que dije en aquella lamentable oportunidad: «Lo que viene ahora, no será un clásico Alianza Lima – Universitario. Lo que pasará será el largo camino de un padre de familia por encontrar justicia en un país que muy pocas veces otorga condenas merecidas a aquellos que atentan contra la vida de las personas».

Quien escribe estas líneas, tuvo la suerte de conocer a un hombre sereno a pesar de la lamentable pérdida de su hijo. Don Walter no perdió la confianza en que la justicia iba a sentenciar con la pena máxima a estos desalmados que confundieron el fútbol con la matonería. ¿Qué querían comprobar? ¿Qué buscaban violentando a los simpatizantes rivales? ¿Localía? ¿Respeto? Sencillamente, Sánchez Manrique y Roque Alejos se ganaron el repudio incluso de seguidores de su mismo equipo, quienes condenaron estos lamentables hechos que estuvieron por encima del clásico mismo del fútbol peruano.

Y que esta condena siente de una vez por todas un precedente en el fútbol peruano: Basta ya de barras bravas, de matones disfrazados de hinchas. El fútbol es el deporte más hermoso del mundo, un deporte popular en el Perú y por tal razón, un motivo de unión para que el padre de familia lleve a su hijo al estadio y disfrute de su equipo favorito. Basta ya de violencia, de crímenes, de corrupción en la cancha.

Solo quiero ser breve para decir que la tarea de Don Walter no termina aquí. Anunció que con el millón de soles de reparación civil, trabajará para reformar a los malos simpatizantes y convertirlos en protagonistas de una fiesta bonita llamado fútbol. Desde aquí, solo puedo decirle a Walter hijo, al hincha de Alianza Lima, al amigo… Descansa en paz (ahora si, como Dios y la justicia mandan).

Pocas ideas para sumar un punto

Fueron dos tiempos en el partido. En el primero, Juan Aurich sometió a Alianza y fue superior durante 45 minutos en los que el marcador pudo ser un poco más holgado que un 1-0. En la segunda parte, Alianza fue más, pero apeló al corazón que al fútbol bien elaborado y así ¿se puede jugar?

Lo comentamos en el artículo anterior: Hay que tener mucho cuidado con Juan Aurich. El «Ciclón» armó un plantel interesante y decidido a pelear sí o sí por el título nacional a fin de año. Es más, centrémonos del medio para adelante, donde puede hacer daño con tres delanteros que pueden herir a cualquier defensa con el juego con los pies y con el juego de cabeza: Roberto Ovelar, Hernán Rengijo y Germán Pacheco.

Alianza Lima salió así al partido:

mi alineacion

En realidad, los nombres no variaron respecto al partido ante León de Huánuco. Solo ingresó Guillermo Guizasola en lugar de Luis Trujillo en la banda izquierda. El primer tiempo se caracterizó por dos factores: El juego fuerte (principalmente de Molina) y las imprecisiones de Gabriel Costa.

El juego fuerte es un punto que deberíamos agregar en este análisis. Molina vio la amarilla antes de los 10 minutos del partido y eso condiciona el accionar del jugador, más aún si se trata de un volante de primera línea, de aquel que tiene que destruir las jugadas del contrario.

El uruguayo Costa quiso ir de menos a más pero lució ansioso en el partido, demasiado ansioso. ¿Presión? Quizás, porque se supone que debe ser el hombre que administre la pelota en Alianza, que genere las principales ocasiones de riesgo en un plantel que careció de «10» por mucho tiempo.

Si Costa no funciona, es difícil que la pelota llegue a los pies de Aguirre y Guevgeozián. Aurich aprovechó esos momentos imprecisos de Alianza pero no fue contundente. En algunos pasajes del partido, la defensa de Alianza pudo controlar a Ovelar y a Pacheco, pero se le hizo difícil darle caza a los laterales Cuba y Céspedes. Así fluyó el primer tiempo, con un Alianza que sufrió un gol anulado a Walter Ibáñez.

En la segunda parte, el cambio de mentalidad fue notorio. Alianza salió enchufado al gramado de juego y rápidamente se encontró con el gol del empate. Centro de Roberto Guizasola a la cabeza de Mauro Guevgeozián y el uruguayo anticipó a la defensa chiclayana con una «palomita» que hizo imposible el intento de Goyeneche por evitar el gol.

600x-bocon-fotos-81972120140222194135

El empate le dio otro ritmo al partido. Alianza se animó, a la desesperada, pero se terminó animando por empujar más hacia el ataque. Los ingresos de Ponce y Khan le dieron más rapidez e ideas al equipo y merecimos los tres puntos. Pero la falta de definición y un grosero error del árbitro Michael Espinoza, resultaron gravitantes para que Alianza evite sumar una victoria en su primer partido oficial jugando en el estadio «Alejandro Villanueva».

El empate no es malo porque se sumó ante un rival duro como Juan Aurich, que jugó al estilo que le gusta a Roberto Mosquera y que le dio frutos en el Sporting Cristal campeón del 2012. Por ahora, Sanguinetti tiene que replantear ciertas cosas como por ejemplo la titularidad de Molina y la no inclusión desde el inicio de Paulo Albarracín y del propio Junior Ponce.

Eso si, los árbitros deben poner de su parte y trabajar por el bien del espectáculo. El penal de Céspedes a Ponce fue más que evidente y Espinoza evitó el cobro, creyendo que se trató de una simulación del aliancista para comprar una falta. Aquí faltó la comunicación del juez principal con su asistente, algo primordial para el trámite del partido y las dudas que pueden existir relacionadas a una falta.

La tercera fecha del Torneo del Inca 2014 tendrá a Alianza visitando en Moquegua al San Simón este domingo a la 1:30 de la tarde.

[yframe url=’http://www.youtube.com/watch?v=1XnsM-yFCLE’]

 

Un punto y mucho por mejorar

Un viaje en bus de 10 horas sumado a un partido complicado ante un rival duro como León de Huánuco tuvo como resultado final un 0-0 en el inicio del Torneo del Inca 2013. Recién es la primera fecha pero hay algunos puntos para destacar en la propuesta de Guillermo Sanguinetti y también ciertos detalles que (urgen y se) deben mejorar.

La primera formación oficial fue así:

mi alineacion

 

Alianza empezó con un ritmo vertiginoso el partido, creando situaciones de peligro a balón parado en los pies de Luis Trujillo y Gabriel Costa. Pero, León respondió de contragolpe y Johan Fano fue su arma más peligrosa aunque encontró a un Forsyth seguro en el arco y una de las figuras en el «Heraclio Tapia».

El primer tiempo pudo acabar con ventaja para Alianza en el marcador tranquilamente. Pero en el segundo tiempo el panorama fue distinto. No solo León llevó peligro al arco de Forsyth con disparos de fuera del área sino también, el cansancio empezó a hacer efecto en los jugadores blanquiazules.

Costa fue quien más sintió el desgaste del partido y prácticamente desapareció del partido conforme avanzaban los minutos del segundo tiempo. Si Costa y Aguirre no están en óptimas condiciones, difícilmente el balón llegue a los pies de Mauro Guevgeozián, otro jugador que tuvo un par de chances en la primera parte pero que en el complemente fue apagándose poco a poco.

Foto: El Comercio
Foto: El Comercio

Lo que me gustó en materia individual fue lo hecho por Julio Landauri. Demostró que será un jugador útil tácticamente, más aún si no está disponible Víctor Cedrón, un jugador que la conoce con la pelota en los pies pero que por problemas contractuales con la Universidad César Vallejo. Landauri transitó por la banda izquierda  y pese a que no fue del todo profundo, trató de inquietar y hacer jugar a sus compañeros.

Alianza aún está empezando un largo camino. Huánuco fue el punto de partida para una temporada que debe ser distinta. Ayer se vio un equipo comprometido con la marca, pero aún carente de un juego en colectivo. Es necesario ese jugador «10» que maneje el sistema, es necesario que el problema con Cedrón se solucione a la brevedad y que la dirigencia siente un posición respecto a ester asunto junto a sus pares de la UCV.

La próxima fecha será este sábado a las 5:45 de la tarde ante Juan Aurich en el estadio «Alejandro Villanueva». Mucho ojo con el «Ciclón», que viene de ganar 3-1 al Inti Gas y que cuenta con un tridente ofensivo peligroso conformado por Hernán Rengifo, Germán Pacheco y un conocido por todos los blanquiazules: Roberto Ovelar.

El resumen del León de Huánuco 0 – 0 Alianza Lima

[yframe url=’http://www.youtube.com/watch?v=G_8lf511wHM’]

Fue un 15 de febrero

Esta semana no solamente abre la participación de Alianza en la Copa Inca ante León de Huánuco en el ‘Heraclio Tapia’ sino también conmemora un aniversario más de la fundación del mejor equipo, del cuadro más popular de nuestro país. Son 113 años los que Alianza Lima cumple llevando alegría a la mitad más uno de todo el país y hay varios motivos para sentirnos orgullosos de eso.

Mi primer recuerdo:

Queda claro que el aliancismo lo llevo desde niño. ¿Cómo fue? ¿Quién fue el culpable? Lo primero que recuerdo de Alianza Lima fue el equipo de 1992, aquella generación de nuevos ‘Potrillos’ que, liderados por Waldir Sáenz, se encargaron de llevar la fiesta a las tribunas cada tarde de sábado en nuestro barrio de La Victoria.

Ocurrieron dos hechos que me motivaron a declarar mi hinchaje por Alianza Lima, dos pasajes que nunca olvidaré, que guardo siempre como la mejor síntesis de lo que significa el cuadro blanquiazul en la vida de cada uno de sus hinchas.

Yo me hice hincha de Alianza en dos etapas, aunque suene extraño. Primero simpaticé con el equipo de 1993, con aquel gol que marcó Waldir Sáenz en la definición por el subtítulo en 1993 ante Sporting Cristal. Recuerdo mucho que a mis siete años de edad, vibré con esa jugada, pues todo el Estadio Nacional celebró la conquista de quien años después, se transformaría en el ‘Goleador Histórico’ del club.

Fue uno de los mejores planteles que armó Alianza. Poco me importó el tiempo que se llevaba sin campeonar, porque Alianza Lima no vive de los resultados, vive de la pasión de su gente, del amor de los blanquiazules que cada fin de semana se reúnen a disfrutar del carnaval grone, de la calidad que sus jugadores transmitieron a lo largo de su historia.

Sin embargo, esa simpatía se transformó en hinchaje en el inolvidable clásico del 6-3, siendo más preciso en el cuarto gol anotado por Paulo Hinostroza. Más que por el gol, meagradó mucho la celebración de ese gol. Fue un instante único, especial, que me enganchaba para siempre con el eterno amor: Alianza Lima. Fue pasar por encima del eterno rival.

[yframe url=’http://www.youtube.com/watch?v=XMCECi65-Co’]

Ser hincha de Alianza Lima es lo mejor que me ha pasado en la vida. Es celebrar los triunfos y también poner el pecho en las derrotas. En mis  años de vida, he sabido saborear las burlas en el último periodo de las 18 temporadas sin campeonar,  pelear el descenso en 2008 y sufrir con algunas decisiones que no nos fueron favorables. Pero también ha podido saborear la gloria de 1997, el festejo del Centenario, el bicampeonato de 2003-04 y el último título de 2006. Con esos logros, y cómo se dieron ¿Quién no quisiera ser hincha de Alianza?.

Este es solo el principio de la celebración. A Alianza lo celebramos toda la semana.

A mirar el 2014 con ojos más optimistas

Atrás quedó la irregularidad del 2013, en que empezamos con cierto optimismo pero lo terminamos ‘pidiendo la hora’ y clasificando a la Copa Sudamericana. El 2014 pinta de otro color para Alianza y la victoria ante Universitario en el clásico del Verano invita a hacer la idea de que el equipo peleará de principio a fin por el título de la temporada.

Lo primero que destacar en esta nueva versión del equipo es que hay variantes. El año pasado quedamos cortos y muchas veces, al voltear hacia el banco de suplentes, ni Wilmar Valencia ni Francisco Pizarro encontraron las soluciones para un mejor funcionamiento del equipo.

Hoy, Guillermo Sanguinetti tiene una mixtura de jugadores para elegir y sacar los resultados esperados. Quizás no será un equipo brillante, pero lo que el hincha de Alianza espera es que el club recupere su mística, su estilo y tradición de juego habilidoso, cálido y que genere satisfacción en el simpatizante que va religiosamente a la tribuna.

Lo del viernes en la ‘Noche de la Magia Blanquiazul’ y la victoria sobre los cremas confirman que el hincha nuevamente da su voto de confianza en el equipo, que además de luchar por el título nacional, tendrá que llegar lo más lejos posible en la Copa Sudamericana 2014.

Línea por línea

Debo confesar que las primeras propuestas de equipo titular de Sanguinetti no me resultaron del todo convincentes:

Arco: Se sabe que George Forsyth es el arquero titular pero Manuel Heredia demostró una buena regularidad en la temporada pasada. La lucha por el arco será ardua y los dos tienen varias opciones de ser parte del once inicial en la ‘Copa Inca’. Sanguinetti (y Francisco Pizarro) tienen la palabra final.

Defensa: La propuesta es con Roberto Guizasola, Koichi Aparicio, Walter Ibáñez y Luis Trujillo. Por las bandas, creo que no hay objeción alguna pues ambos son jugadores de la casa. Ibáñez supo ganarse el respeto del hincha y es el capitán del equipo tras la partida de Henry Quinteros. Con Aparicio aún manejo mis dudas y me gustaría que José Canova tenga más minutos en cancha. Una lesión lo apartó del primer equipo la temporada pasada, pero en el 2012 ya había demostrado tener condiciones para formar una buena dupla con el uruguayo.

Volante: Queda claro que Paulo Albarracín y Pablo Míguez deben ser la primera línea de volante, aunque Sanguinetti apostó en estos partidos amistosos por Josimar Atoche en lugar del ‘Cachetón’. Mención especial para Míguez, uno de los que más destacó en la pretemporada y en el clásico demostró que tiene calidad para recuperar pelota y también sumarse poco a poco al ataque. Es ‘el refuerzo’ de la temporada.

Más adelante, Gabriel Costa mostró algunos chispazos aunque aún le falta acomodarse mejor en el terreno de juego. El uruguayo hasta ahora aprueba el examen pero sabe que la competencia por ganarse un lugar será dura, más aún si tienes a un Víctor Cedrón que tiene calidad y habilidad para controlar el medio campo. Si Junior Ponce quiere dejar de ser conocido como un ‘jugador de recambio’ debe ser más protagonista y participativo en el juego y comprometerse con el juego. Ayer empezó bien pero luego fue decayendo con el correr de los minutos.

¿Recambio? Interesante lo aportado hasta ahora por Julio Landauri e Israel Kahn. Más minutos para ambos porque se tratan de jugadores que de verdad, la conocen.

Ataque: Wilmer Aguirre ya tiene la experiencia, pero no la velocidad de años anteriores. Ayer anotó en el clásico pero ahora lo vemos apoyando también en labores defensivas. El ‘Zorrito’ sabe que tiene un clavo que sacarse este año y confiamos que así sera. Como único punta, Mauro Guevgeozián apunta a ser titular, pero detrás del uruguayo están Juan Diego González Vigil y Mauricio Montes. Tres nombres para un solo lugar y que solo Sanguinetti sabrá ordenar.

Ese es el panorama de Alianza para el 2014, un año en el que el título debe ser el principal objetivo. Ya no hay excusas que valgan, los refuerzos están, las inversiones están, la hinchada siempre está. Solo queda esperar que el balón ruede y que el equipo salga siempre a ganar.