¡Aquellos regalos de niño en Navidad!

Otra Navidad que se nos viene y me pongo a recordar nostálgico los primeros regalos cuando era niño. Esos años a los que quisiera regresar y lamentablemente, no puedo.

Eran los primeros días de diciembre, con mis primeros  años del cual recuerdo,  a la espera de que llegue con rapidez  el  día 24. ¡Como no recordarlo!

Y llega la tan esperada noche. Mis hermanos y yo ansiosos de abrir los regalos que nos habían dejado al pie de un árbol, hecho de alguna rama fuerte y seca de un árbol grande y frondoso (ahora se consigue en una tienda por departamentos o supermercado a un precio que muchas personas lo pueden adquirir).

Pero, ¿qué nos pedían antes de recibir los presentes?, lo que aumentaba nuestro tormento por el tiempo adicional pasada las 12 de la noche, simplemente tomar el chocolate en la mesa con toda la familia y esperar que terminen todos. ¡Que desesperante!

Y ahora teníamos que esperar que los mayores terminen, ¡si nosotros los niños lo hicimos en 5 minutos, y todavía caliente, casi quemándonos la boca! No debían abusar de nosotros de esa manera (esos eran nuestros pensamientos).

¿Y cuáles eran nuestros ansiados regalos?, pues para los varones una pelota, un carrito o unas pistolas de plástico de la marca Basa (no se si todavía existe esa marca), un carrito de madera hecho a mano.

Cómo cambia el tiempo, ¿ahora que regalamos? un Play Station , un Xbox, un celular multimedia, un carro a batería . Realmente, cada niño en su tiempo.

A las niñas de nuestro tiempo les regalaban unas muñecas, que también eran de la marca Basa, un juego de ollas de aluminio, que todavía se ven en los mercados o bodegas.

¡Eso era nuestra diversión! Juguetes tan simples que nos entretenían sanamente sin que logren hacernos dependientes de ellos.

Esa noche teníamos poco tiempo para salir y mostrar a nuestros amigos nuestros regalos y ellos a nosotros lo que recibieron. Entonces, nos acostábamos temprano, bueno, pasado de la 1 de la mañana ya no era tan temprano.

A la mañana siguiente, tomábamos desayuno rápido para luego salir a buscar a los amigos del barrio y mostrar lo que recibimos en noche buena. Y luego jugar con ellos.

¿Cuánto tiempo nos duró el juguete? No lo recuerdo, pero si me acuerdo de muchos momentos alegres que pasábamos con ellos.

Hoy día, la tecnología ha traído nuevos tipos de regalos, algunos de ellos crean dependencia de los niños manteniéndolos atados como los juegos de video. Que como padres debemos, lograr que eso no suceda, sino, más bien, motivarlos a disfrutar de paseos campestres o en el parque.

No puedo confirmar si mi niñez fue mas sana o divertida, cada niño se divierte a su manera y uno de los momentos más felices de ellos es la Navidad, porque todos  reciben regalos, mejor dicho muchos niños, y realmente me encantaría que todos lo recibieran.

Que gratificante es ver la alegría en las caritas de los pequeños, en su reacción, en su forma de  agradecer, realmente eso no tiene precio (frase certera de una tarjeta de crédito).

Si recordamos como lo disfrutamos, intentemos hacerlo ahora con ellos.